El resultado de junio demostró la fuerte desaceleración que está experimentando la inflación en nuestro país, lo que motivó a las autoridades del Banco Central del Paraguay (BCP) a recortar el pronóstico anterior ubicándola actualmente en el 4,1 %. En cuanto al nivel de crecimiento, señalan que pese a variaciones en los sectores, se mantiene en 4,5 % para finales del 2023.
El presidente de la matriz bancaria, José Cantero, y el economista jefe, Miguel Mora, realizaron hoy viernes 28 de julio la presentación del Informe de Política Monetaria (Ipom) en donde detallaron sobre las condiciones económicas globales, regionales y locales.
En la presentación, el titular del BCP habló acerca de los últimos acontecimientos internacionales y destacó que las perspectivas de crecimiento de la economía mundial mejoraron para el presente año en relación a las perspectivas presentadas en el informe anterior, mientras que la inflación se moderó.
En el entorno local, indicó que durante el año anterior se observó que el precio de las energías, específicamente del combustible y la canasta de alimentos fue el de mayor incidencia en la inflación del año, situación que se fue disipando llegando actualmente a tasas negativas, lo que generó una importante desaceleración para este periodo.
Ante eso, la proyección del equipo técnico de la gerencia de Estudios Económicos se corrigió a la baja esperando que la inflación para el cierre del 2023 sea del 4,1 %, por debajo del 4,5 % esperado en el informe anterior.
“Se espera que converja a la meta del 4 % en los próximos meses manteniéndose en torno a ese 4 % para el 2024 y también para el 2025″, añadió Cantero. Manifestó que si bien persisten los riesgos y en línea con los movimientos de los precios tanto locales como internacionales, esperan que el índice de precios baje al porcentaje proyectado en esta presentación.
Se mantuvo crecimiento
Por su parte, Mora afirmó que la proyección de crecimiento del PIB para el país se mantuvo en el orden del 4,5 % en este informe. Este nivel de crecimiento sigue en línea con la proyección de recuperación del sector agrícola ante un mejor desempeño del rubro de la soja.
En cuanto a la ganadería, la corrección fue a la baja debido a un menor nivel de faenamiento de bovinos, producto de la sequía del año anterior que sigue afectando las actividades. En el sector de manufactura también se observó una baja producto del menor movimiento en el sector cárnico y la fabricación de aceite.
El sector de la construcción también registró un recorte a la baja que fue del 2,6 % al 4 % de caída que se espera pueda converger en los próximos meses, además del sector de comercio ante los ajustes realizados en el sector de manufactura. LN
