Nuestro país ya reportó 126 casos de la temida viruela símica y no se registraron fallecidos, aseguró el infectólogo Hernán Rodríguez. El médico contó cómo se diagnosticó el primer caso humano infectado en el continente africano en 1970 y que luego se expandió a América en el año 2022.
“Todo comienza en el año 1958 cuando unos monos de África son llevados a Copenhague, Dinamarca, para el desarrollo de la vacuna contra la polio. Entonces, estos monos tenían una enfermedad y al tomarles muestras se determinó, como causa de la enfermedad, que tenían un virus”, señaló a la 1020 AM.
Dijo que inicialmente se lo denominó “virus de la viruela del mono” porque fueron simios los que tenían la enfermedad.
“En años posteriores se encontró en algunos de los zoológicos de Estados Unidos el mismo virus, pero en otros animales (antílopes, gorilas, etc.). Ahí se dieron cuenta de que no solamente en monos se producía una enfermedad por este virus”, explicó.
Epidemia en el año 2017
El especialista refirió que recién en 1970 se diagnosticó el primer caso en un niño de 9 años, en el África. “Es el primer enfermo por este virus que ya se había bautizado como viruela del mono. Pero evidentemente no es solo en el mono ni en otros animales, sino que ya a partir de ese año se ve el primer caso en humanos”, puntualizó.
El doctor Rodríguez indicó que, posteriormente, se empezaron a ver otros casos, pero de manera esporádica en el África. “Especialmente, en el África Central, más frecuentemente en un país llamado República Democrática del Congo que si miramos el mapa está en el centro más o menos del continente”, expresó.
Y desde el año 2017 empieza a aumentar la cantidad de casos positivos, “ya teniéndose una epidemia, una expansión del virus en seres humanos”, prácticamente en todos los continentes.
“En América llega en el año 2022 y, en el 2023, Paraguay llega a tener 126 casos, afortunadamente no hubo fallecidos. Y esa es la historia resumida de lo que es este virus que produce esta enfermedad llamada viruela símica o Monkeypox”, finalizó.