Aumentó el porcentaje de optimistas respecto de los años pandémicos. Una menor cantidad de personas piensa que habrá dificultad económica con relación a los últimos tres años.
El último Estudio de Opinión Pública Nacional “Expectativas Económicas”, realizado por ICA Consultoría Estratégica, indica que el 52% de los encuestados espera que el 2023 sea económicamente más próspero que el año que culmina; un 23% considera que será un año de mayor dificultad económica y el 25% que se mantendrá igual. En general, se observa un índice neto de optimismo hacia este nuevo año del 30%.
En el gráfico histórico, en 2020 y 2021 se midieron las expectativas positivas netas más bajas con 13% y 18%, respectivamente; sin embargo, en este 2022 estas expectativas crecieron en 12 puntos porcentuales con respecto al año anterior.
La consultora refiere a continuación las variaciones de los índices netos de expectativas según las características sociodemográficas.
Por grupos etarios se puede observar que los paraguayos entre 18 a 34 son menos optimistas, siendo su expectativa positiva neta alrededor del 27%; mientras que los adultos entre 35 a 54 años, y de igual forma los adultos mayores a 55 años obtuvieron el mismo índice neto del 31%.
El índice neto de expectativa económica del grupo con primaria completa o menos es de 32%, de igual forma para los que llegan a secundaria completa. Por su parte, existe un menor optimismo en el grupo de personas con una educación superior siendo el índice 4 puntos porcentuales inferior (28%).
En cuanto a la expectativa de un mejor escenario económico en el año 2023 por zona, Asunción presenta un índice neto alrededor del 17%, seguido por Centro-Norte con 21%. En tanto que las zonas más positivas son Central con 30%, y el Sureste con una expectativa general optimista del 40%.
La consulta que se les hizo a unas 500 personas (que fueron las encuestas efectivas sobre una cantidad total de 3.965 contactos) fue: “Comparado con este año (2022), en su opinión, ¿el próximo año (2023) será un año de prosperidad económica, un año igual a este o un año de dificultad económica?”.
Dentro de la Evolución del Índice de Expectativa Económica, ICA Consultoría Estratégica, expone que el mayor porcentaje concentrado en la variable prosperidad económica se dio en el año 2016, con 56%; mientras que el año 2014 la cantidad de encuestados que avizoraba el año siguiente con prosperidad económica se había ubicado en 54% de todos los encuestados.
Los años 2020 y 2021 fueron los más pesimistas en torno a la percepción que tenía la gente, según los datos citados, puesto que solo alcanzaron 46% y 47%, respectivamente, las perspectivas de que el siguiente periodo sería de prosperidad económica.
Las cifras
58 por ciento de quienes viven en la zona sureste del país piensa que habrá prosperidad económica en 2023.
30 por ciento es el índice neto de optimismo que expone la gente en el país respecto de la economía en 2023.
Avizoran un PIB de 4,5% a 5%
El Banco Central del Paraguay (BCP) está proyectando para el 2023 un crecimiento del 4,5% del Producto Interno Bruto (PIB), el cual va a estar motorizado principalmente por una recuperación de la agricultura y sus efectos indirectos sobre otros sectores de la economía”, según había precisado José Cantero, titular de la banca matriz, hace unas semanas.
Explicó que eso representará un gran repunte económico, atendiendo a la posible desaceleración económica mundial, de acuerdo con directivo. En ese sentido, explicó que el crecimiento estaría explicado por la recuperación en el sector agrícola que se espera genere un efecto positivo indirecto en todos los sectores del país.
Por su parte, el ministro de Hacienda Oscar Llamosas ofreció recientemente una visión de lo que fue el desempeño del país y aseguró que fue distinto a lo que estimaban al inicio como consecuencia de la guerra en Ucrania, que tuvo un impacto en los precios de los commodities y también en las condiciones financieras internacionales. En el caso de Paraguay mencionó que experimentamos un choque adicional que fue la sequía, por lo que se tuvo que desplegar herramientas para poder mitigar sus impactos.
Para Itaú se espera un crecimiento del PIB de 5%, apoyado en un efecto base favorable, pero frenado por un peor escenario global. UH