El cáncer de mama sigue siendo una de las principales causas de muerte de mujeres en Paraguay, país que tiene un promedio de entre 1.700 y 1.800 casos por año. La lucha contra este mal, que puede ser curado si se detecta a tiempo, hace un llamado de sensibilización donde el control anual debe ser una tradición.
Las estadísticas de cáncer de mama en Paraguay registran un promedio de entre 1.700 y 1.800 casos por año, cuando antes se mantenía un promedio de 1.600 diagnósticos de la enfermedad.
Este aumento se debe a que más mujeres se han unido a las campañas de concienciación y de sensibilización, cuyos lazos rosas sostienen que hacerse los estudios anuales es la única manera de salvar vidas a tiempo.
“Decir por qué tanto va en aumento, porque mantenía un promedio de 1.600, es simplemente porque se han abocado a las campañas de detección precoz, a eso nosotros apuntamos”, señaló la doctora Marina Ortega, jefa del Programa de Prevención, Detección Precoz y Tratamiento del Cáncer de Cuello Uterino y Mama, en conversación con Chaco Boreal 1330 AM.
Ortega sostuvo que todas las campañas apuntan a detectar la enfermedad en su primera etapa y no cuando se encuentra en estadios muy avanzados.
“Detectar a tiempo es el pilar angular de esta lucha y sobre que esa paciente tenga un espacio y un tratamiento oportuno”, subrayó al respecto.
De acuerdo con Ortega, una de cada ocho mujeres puede padecer este mal y las probabilidades aumentan con la edad.
La Organización Mundial de la Salud (OMS) indica que el cáncer de mama es la causa más común de muerte en las mujeres en las Américas.
Si bien este mes hasta noviembre aumentan las consultas y los exámenes de mamografía, pasado este periodo las cifras vuelven a bajar. Por ello, instó a que “los controles se deben hacer todo el año”.
“Tenemos 365 días para planificar y la mujer que trabaja tiene que tener ese derecho de dos días libres laborales para poder acceder a ese tiempo de prevención y salvar su vida”, sostuvo la doctora.
¿A qué edad debo hacerme la mamografía?
Ante la duda sobre cuándo iniciar los estudios, Ortega explicó que el primer examen debe realizarse a los 35 años, para luego hacerse de forma anual a partir de los 40 años en adelante.
“La base de todo esto parte del control clínico ginecológico anual, en donde uno tiene que saber qué exámenes y estudios realizarse”, indicó.
Si hay antecedentes familiares, tiene que iniciar mucho antes sus controles.
Aunque no se detecten síntomas, recomendó agendar una visita con un médico mastólogo para tener una mejor planificación de los controles mamarios
Autoexamen a partir de los 18 años
“El autoexmen tiene relevancia desde los 18 años”, afirmó Ortega.
Este paso que puede mostrarnos señales de anomalías debe realizar una vez al mes, después de haber menstruado.
Lo único que se necesita es un minuto de tiempo y con las yemas de los dedos recorrer o palpar ambas mamas, las axilas y los pezones.
Tanto hombres como mujeres deben mirarse al espejo y conocer su cuerpo.
Esto, de acuerdo con Ortega, puede ayudar al paciente a mirar anomalías como la alteración del tamaño de los senos, hoyuelos, secreción de un líquido a través del pezones.
“Hagamos de la prevención una tradición”
El lema que el Ministerio de Salud eligió para este año es “Hagamos de la prevención una tradición”, en el cual se insta a toda la ciudadanía a realzarse los controles anuales.
“El cáncer no es sinónimo de muerte”, expresó Ortega para romper con el tabú del miedo.
En ese sentido, señaló que los tratamientos han avanzado y que se debe entender que la enfermedad debe ser atendida por médicos especialistas.
“El control debe ser de por vida, aunque te digan que te curaste”, finalizó. UH