El 9 de julio de 1868, durante la Guerra de la Triple Alianza contra el Paraguay, las fuerzas navales y del ejército aliado logran sitiar definitivamente a Humaitá. La Fortaleza queda entonces defendida por 3500 combatientes paraguayos con aproximadamente 200 piezas de artillería.
El 9 de julio, también, los paraguayos intentan un nuevo abordaje a los acorazados Barroso y Río Grande de la armada imperial. El operativo estaba a cargo del Sargento Mayor Lino Cabriza con 260 hombres y 24 canoas. Se pudo sólo con la segunda nave y en la lucha murieron la mitad de los guaraníes, así como también el comandante del buque con muchos de su tripulación. Mientras los paraguayos realizaban la difícil misión en la costa del Río Bermejo, en su desembocadura con el Río Paraguay, se inician los tribunales de San Fernando.