23 de julio de 2020 – 06:44
Comuna de CDE prepara fosas comunes y hasta crematorio.Reportaron un fallecido más: la cifra de decesos se eleva a 36.
Paraguay llegó ayer a los 4.000 casos positivos de coronavirus. Así lo confirmó el Ministerio de Salud, al reportar 183 nuevos contagios por COVID-19. Asimismo, la cartera sanitaria informó un fallecimiento, con lo que la cifra de decesos por la enfermedad llega a 36.
Según la entidad estatal, se analizaron 1.841 estudios laboratoriales. Del total de infectados en las últimas 24 horas, 158 corresponden a contactos, 7 al exterior y 18 sin nexo. Todos permanecen en aislamiento.
Ayer se confirmaron casi 200 contagios
Seis de los casos sin nexo pertenecen a Asunción, dos de Ciudad del Este, dos de San Lorenzo, dos de Limpio, uno de Hernandarias, uno de Areguá, uno de Capiatá, uno de Lambaré, otro de San Antonio y uno último de Coronel Oviedo. La buena noticia es que se registraron 84 nuevos recuperados y así 2.391 son las personas que ya lograron superar al virus.
Hay 28 pacientes internados, 10 de ellos en terapia intensiva. El nuevo fallecido era un recluso del penal de Ciudad del Este. El reo contaba con enfermedades de base y estaba internado en el Hospital Integrado Respiratorio de Alto Paraná. Así ya suman tres las víctimas fatales por coronavirus en la cárcel altoparanaense.
19 Este mes
El mes de julio confirmó de nuevo que es el más mortífero desde la llegada del COVID-19 a nuestro país, en marzo. Se está llegando al terrorífico promedio de un fallecido por día, a raíz de la enfermedad.
Vecinos piden muralla para atajar COVID-19
Doce personas (incluida la última víctima de ayer) fallecieron de coronavirus en Alto Paraná. La seguidilla de muertes por COVID-19 puso en aprietos a la comuna de Ciudad del Este tras el rechazo de vecinos del predio de lo que se proyecta como el nuevo cementerio municipal.
Aleysis González, administrador del camposanto de la capital altoparanaense, dijo que el lugar situado en el Km 12, lado Monday, ya estaba a punto como para ser usado, pero se presentó un problema. “Ahora que empieza a fallecer gente estamos limpiando el lugar, para preparar fosas para poder enterrar si en un momento dado explota”, refirió González.
Feroz conflicto
Sin embargo, los vecinos se niegan a aceptar que sean sepultados allí. “No está cerca realmente, pero está en el mismo barrio. Son 30 hectáreas de propiedad. Les explicamos a ellos cómo va a ser el protocolo, pero no quieren saber nada”, lamentó el funcionario . Añadió que el deceso del recluso les obligó a ir al sitio de nuevo, pero mencionó que los lugareños no dejaron ingresar las máquinas. Extra