Asunción, Agencia IP.- En el marco del cumplimiento de las obligaciones establecidas en el Anexo C del Tratado, Itaipu Binacional transfirió USD 119 millones al Estado paraguayo, de enero a marzo de 2023. Los pagos corresponden a royalties, cesión de energía y pagos a la Administración Nacional de Electricidad (ANDE).
El monto supera en USD 24 millones a lo que había transferido la Entidad en el primer trimestre de 2022 y se debe principalmente a las condiciones hidrológicas actuales, así como al óptimo desempeño de las unidades generadoras de la Central Hidroeléctrica.
En los primeros tres meses del presente año, el Tesoro Nacional recibió USD 60,1 millones por royalties y USD 54,2 millones por cesión de energía. Por su parte, la ANDE percibió USD 4,6 millones por el resarcimiento de las cargas de administración y supervisión; de acuerdo con el reporte de la Dirección Financiera, margen derecha, de la Binacional.
En lo que refiere solamente a los desembolsos efectuados en marzo del presente año, los royalties totalizaron USD 21 millones, mientras que el pago por la cesión de energía alcanzó USD 17 millones.
A su vez, la ANDE percibió USD 1,6 millones por el resarcimiento de las cargas de administración. De esta manera, Itaipu sigue honrando en tiempo y forma todos sus compromisos financieros, lo que a su vez significa una inyección económica importante para las arcas públicas.
Según establece el tratado, los royalties constituyen un resarcimiento financiero que perciben los Estados de Paraguay y Brasil por la utilización del potencial hidráulico del río Paraná para la producción de energía eléctrica.
Por su parte, la cesión de energía es la compensación abonada por el Estado brasileño para acceder a la parcela de la producción que Paraguay no utiliza. Estos dos conceptos son transferidos al Ministerio de Hacienda, institución que se encarga de distribuir los recursos, tal como disponen las legislaciones nacionales.
Asimismo, la ANDE recibe mensualmente los pagos por resarcimiento de las cargas y, periódicamente, también obtiene ingresos por las utilidades del capital para hacer frente a sus necesidades presupuestarias, cumpliendo así con lo que estipula el Anexo C del Tratado.
La Central Hidroeléctrica exhibe un excelente índice de operación, gracias al riguroso programa de mantenimiento preventivo de las unidades generadores y los controles que ejecutan los profesionales de la Dirección Técnica.
El trabajo serio y comprometido de sus recursos humanos le permite a la empresa cubrir la demanda energética de los dos países propietarios del emprendimiento hidroeléctrico y al mismo tiempo estar al día con los requerimientos financieros, resalta el informe de prensa de la Binacional.
