Los comerciantes de Salto del Guairá anunciaron que habrá despidos desde marzo, debido a la profundización de la crisis económica. El tercer mes es considerado el peor del año para el sector, pero ahora el panorama es aún más sombrío por la caída del dólar y el acecho del coronavirus.
Nacionales: 03 de mar de 2020
La crisis se profundizó aún más con la caída del real ante el dólar a mediados de febrero, manteniéndose actualmente en el orden de los 4,50 reales por dólar, según los comerciantes consultados.
Se sumó el efecto del coronavirus que, tras la aparición del primer caso en Brasil, desalentó todavía más a los compradores cruzar la frontera.
“Ya hay una recesión mundial y el dólar toma impulso, y entonces casi ya no vale la pena para el brasileño venir a comprar aquí.
Consecuentemente, nos vemos imposibilitados de seguir manteniendo a todos nuestros trabajadores, según explicaron.
El panorama está muy oscuro porque el Brasil va flexibilizando los impuestos de productos importados, además de habilitar los duty free en toda su frontera, lo que nos deja en una posición muy preocupante, de acuerdo a referentes del sector.
La esperanza de los comerciantes está en el proyecto de creación de zonas libres de impuestos en las zonas fronterizas.
Sin embargo, varios gremios ya manifestaron su oposición a la unificación de impuestos a todos los productos importados.
La situación financiera de Salto del Guairá, en particular, se ve muy afectada porque además de la caída de las ventas en el comercio formal, sufrió una gran disminución la segunda fuente de ingreso en la ciudad: el cigarrillo.
Dicho producto, que va de contrabando al Brasil, viene siendo atacado de ambos lados de la frontera por los gobiernos de Brasil y Paraguay, provocando la caída en las ventas.
Se cree que el comercio ofrece aproximadamente 10.000 puestos de trabajo, y unos 5.000 más vivían de la compra y venta del cigarrillo.
Hace aproximadamente un mes, el 5 de febrero, la Unidad Interinstitucional para la Prevención, Combate y Represión del Contrabando (UIC), encabezada por el ministro Emilio Fúster, decomisó más de 20.000 cajas de cigarrillos que estaban listas para ser enviadas al Brasil supuesta mente de contrabando. En el sitio fueron confiscados igualmente 15 lanchas y 15 camiones.
