El lugar podrá albergar 1.800 ataúdes y su capacidad podrá ser ampliada en caso de necesidad.
El estacionamiento cubierto de la morgue de Corllserola, en la provincia española de Barcelona, ha sido adaptado a modo una extensión improvisada del depósito de cadáveres para poder hacer frente al elevado número de decesos provocados por la pandemia de coronavirus en la región.
Con una superficie de 5.000 metros cuadrados y una capacidad para albergar 1.800 féretros —que podría ser aumentada en caso de necesidad—, estas instalaciones serán la morgue de campaña más grande de España.
Este jueves se realizaban allí las últimas tareas de conexiones eléctricas para instalar el sistema de enfriamiento.
El establecimiento aloja actualmente los restos de 200 víctimas fatales del covid-19, mientras que el total de fallecidos por la enfermedad en el país alcanza este viernes al menos 10.935 personas, cerca de 2.000 de ellas residentes de Cataluña.