Río de Janeiro.- Las ventas de vehículos nuevos en Brasil cayeron en noviembre hasta 195.212 unidades, un 33,74 por ciento menos que en el mismo mes de 2014, si bien se produjo una mejora con relación a octubre, informó este martes la patronal del sector.
Los datos de la Federación Nacional de Distribución de Vehículos Automotores (Fenabrave) muestran una considerable caída de las ventas (medidas por la expedición de placas) con relación a noviembre del año pasado, cuando se llegaron a matricular 294.636 unidades, lo que es atribuido por la patronal a la “volatilidad del mercado” brasileño.
La comparativa de los once primeros meses del presente año, con 2.341.256 unidades vendidas, respecto al mismo período de 2014, cuando fueron 3.127.804 las matriculaciones, también arroja un balance negativo; en este caso una caída del 25,15 %.
El único atisbo de luz para el sector es la comparativa con octubre pasado, cuando se vendieron 192.151 vehículos nuevos en el país, lo que supone una mejora del 1,59 % en noviembre.
El sector atribuye esta situación en parte a la decisión del Gobierno, con un déficit récord en las cuentas públicas, de suspender los incentivos fiscales con que permitió una reducción de los precios el año pasado para estimular la industria automotriz.
Por otro lado, la mala situación económica del gigante suramericano, en recesión y con tasas de inflación y desempleo en alza, ha afectado de manera severa al consumo de los brasileños.
El sector del automóvil ha sido uno de los más afectados por la actual crisis del país, cuya economía, según datos del Gobierno, se contrajo en el tercer trimestre un 4,5 % en comparación con el mismo periodo de 2014. EFE