Estudios confirman que la variante brasileña del virus del SARS-CoV-2 es mucho más contagiosa y que, inclusive, podría llegar a ser más letal, convirtiéndose en una amenaza global por su elevada transmisibilidad.
Una serie de ensayos clínicos publicados en el repositorio de medRxiv, compartidos por la Sociedad Paraguaya de Infectología (SPI), dan cuenta del alto impacto de la variante P1 del COVID-19 originada en Brasil.
De acuerdo a uno de estos ensayos, la variante brasileña es más severa si se hace una comparación de la letalidad registrada en febrero del 2021 con la de enero 2021. En este caso, se observó un aumento de la tasa de letalidad (TL) en todos los mayores a 20 años.
Los pacientes de 20 a 29 años experimentaron una triplicación de su tasa de letalidad, mientras que los que se encuentran en la franja de 30 a 59 años experimentaron una duplicación de TL.
“Las personas de entre 20 y 29 años en febrero de 2021 tenían un riesgo de muerte tres veces mayor en comparación con enero de 2021”, refiere el estudio científico.
Otro ensayo publicado en el mismo portal indica que la variante P1 detectada en Manaos es 2,5 veces más contagiosa que la cepa original del SARS-CoV-2. Este aumento del 150% lo coloca por delante de la variante B117 descubierta en Reino Unido que se estimaba era entre 30% y 60% más contagiosa.
La probabilidad de reinfección por la variante P1 ronda entre el 25% y el 61%, mientras que la tasa de transmisibilidad es 1.4 a 2.2 veces mayor que la cepa original, según otro de los ensayos dados a conocer públicamente mediante medRxiv.
Según la Sociedad Paraguaya de Infectología, todos estos hallazgos tienen graves implicancias en salud pública, ya que la circulación de la nueva variante brasileña plantea una “amenaza global” debido a su muy alta transmisibilidad y además pone de manifiesto la necesidad de monitorear y contener urgentemente su propagación. HOY