Trabajar afuera y volver a Paraguay

Me gustaría comenta r les cómo fueron los últimos meses de mi estadía en Ale­mania, meses en los cuales estuve realizando una pa­santía laboral en una de las empresas más prestigiosas de Alemania, Robert Bosch.

Antes de iniciar la pasantía laboral en Alemania, pre­viamente y como alumna cumplí con el programa de estudio de la Universidad, habiendo estado matricu­lada en la carrera de Inge­niería Industrial. El período lectivo tuvo una duración de 6 meses en las aulas de la Facultad SRH Hochshule Heidelberg, donde obtuve muy buenas calificaciones. Las clases fueron dictadas íntegramente en alemán, situación que me obligó y, a la vez, me ayudó a perfec­cionar la comunicación y fluidez en el idioma.

Al mirar el retrovisor, re­cordar y reflexionar sobre todas las experiencias vividas durante el último año en Alemania, puedo mencionar que además de haber aprendido un idio­ma nuevo, he conocido y he vivido una cultura distinta, he adquirido los conocimientos básicos, habilidades y destrezas mínimas para trabajar con empresas internacionales de cualquier parte del mun­do, gracias a la experiencia que me brindó la afamada Robert Bosch, y no solo eso, sino que me siento feliz de poder decir que: estos años de estudios además de ser el cimiento de la carrera profesional que proyecto, me sirvieron de base para vivir la experiencia de una cultura absolutamente di­ferente a la paraguaya.

La pasantía que realicé, fue dentro del depar­tamento de Gestión de Proyectos, área que siempre me gustó, lugar fundamental dentro de cualquier organización, en donde confluyen e interactúan las más va­riadas disciplinas.

La rama de Gestión de Pro­yectos es para el ingeniero industrial de suma impor­tancia. Enseña a tomar de­cisiones, organizar tiempos y trabajar con los recursos disponibles. Es una disci­plina muy completa, con­siderando que un proyecto puede tener muchas fases y teniendo así diferentes partes que un profesional debe ir realizando, es inde­pendiente de que trate el proyecto, si uno tiene los conceptos bien definidos, tendrá el éxito esperado para cualquier proyecto existente.

¿CÓMO CONSEGUIR UN PUESTO EN ALEMANIA?

En Alemania uno debe aplicar a los puestos de tra­bajo, luego de acuerdo a las capacidades y habilidades se tiene una respuesta, ya sea positiva o negativa. Es realmente bueno el sistema que existe acá, uno debe de competir honestamente para obtener el trabajo, muy diferente a lo que general­mente se ve en Paraguay, desde acá no es fácil llamar a papá o mamá para que solucionen el problema. El proceso de selección radica en un proceso sumamente exigente pero a la vez muy transparente y por sobre todo, motivador. En mi caso particular, no fue fácil ingresar a la empresa, pero luego de meses de buscar y aplicar a los puestos de trabajo de mi interés que ofrecían las empresas, tuve la satisfacción de haber lo­grado el puesto.

Saber el idioma es algo más que importante al querer trabajar en el país. Tam­bién es cierto que existen puestos de trabajo que no requieren que uno sepa del idioma, pero la gran mayo­ría de las compañías te exi­gen saberlo y por supuesto hablarlo. Está por demás decir que las chances para obtener el puesto que an­heles se elevan automáti­camente al hablar alemán.

¿QUÉ FUE LO DIFÍCIL DE TRABAJAR CON LOS COMPAÑEROS ALEMANES?

Ser fluente en el idioma fue el primer desafío durante la pasantía que he realiza­do. En principio me supuso una tarea ardua entender los términos técnicos utili­zados en el día a día, había situaciones, generalmente en las reuniones, en las que podía comprender de que trataban pero me era difícil expresar mi opinión. Con el tiempo fui mejorando y además, entendiendo aún más las tareas que iba rea­lizando.

Como no soy una alemana nativa, el tiempo fue para mí muy importante. El inicio de cualquier nueva actividad siempre resulta difícil y más aún cuando el tiempo de trabajo es muy reducido. Poder integrarse a la empresa y a una nueva cultura de trabajo lleva su tiempo. Como todo trabaja­dor nuevo, al principio tuve actividades acordes en responsabilidad y sofisti­cación, en función a la anti­güedad laboral que llevaba, pero una vez que fueron conociéndome mejor y to­mándome la confianza ne­cesaria, mis tareas fueron cada vez más complejas.

DIFERENCIAS ENTRE TRABAJAR EN ALEMANIA Y PARAGUAY

Creo que la primera y gran diferencia que existe es la remuneración. Si bien es algo que no se puede dis­cutir mucho, ya que somos países completamente diferentes, es una asime­tría que debe converger de modo a reducir la fuga de cerebros, porque estás trabajando en lo mismo y desde la misma profesión.

Dentro de la empresa se aprende muchísimo, prác­ticas que con un poco de esfuerzo podrían imple­mentarse en el Paraguay. Esta experiencia me obliga a apuntalar e implemen­tar estos nuevos conoci­mientos en la industria paraguaya, uno de ellos, la confianza que los emplea­dores depositan en sus em­pleados.

Sentirse apoyado y respal­dado dentro de una orga­nización es sumamente importante, resulta en una manera muy eficiente de avanzar con el equipo, uno puede estar tranqui­lo, uno sabe que existe un equipo de compañeros y jefes que están para resol­ver los posibles errores o aclarar las dudas. Con este respaldo, ganar confianza para el desarrollo de las actividades es mucho más fácil, además motiva a los empleados a enfrentar los desafíos, probar nuevos métodos de trabajo e im­plementar soluciones des­de nuevas perspectivas, proponer ideas y mucho más. Ese sentimiento de formar parte del equipo o de la empresa genera en los empleados además de un sentido de pertenencia, mucha disciplina, siendo un fundamento básico para el éxito.

Otra gran diferencia y muy notable dentro de las empresas alemanas en comparación con las paraguayas, es que en Alemania los trabaja­dores reciben el mismo trato, no hay discrimi­nación basada en la posición en la que estés trabajando. No solo eso, sino que en Alemania la empresa no solo se pre­ocupa, sino que además se ocupa bastante para que el trabajador se en­cuentre bien, para así lograr un trabajo mucho más eficiente, se tiene una política de ganar-ganar, se busca lo mejor para la empresa y lo me­jor para el trabajador, son muy flexibles con los horarios, vacaciones e incluso días libres que necesite el trabajador.

Paraguay tiene mucho que mejorar y un mundo por conquistar. Con el ímpetu y el impulso de sus ciuda­danos, el sendero que nos lleve a una mejor patria para todos y para cada uno de nosotros, será posible.

¡Arriba Paraguay, lucha por tu ideal!

¡Mi agradecimiento espe­cial a los directivos y em­pleados del diario 5días, y por su intermedio a sus distinguidos lectores!