Las articulaciones frecuentemente se enfrentan a lesiones y al desarrollo de algunas afecciones degenerativas que suelen causar dolor e inflamación. Muchas veces, los padecimientos en estas estructuras se deben a enfermedades autoinmunes como la artritis, pero también a lesiones, tendinitis, osteoporosis y distensión muscular. La razón de estos dolores puede requerir tratamiento médico.
A la par de la consulta médica, ciertos remedios caseros como baños tibios, masajes y ejercicios de estiramiento pueden ayudar a aliviar las molestias. Para evitar el dolor e inflamación en las articulaciones también es importante la ingesta de algunas vitaminas que juegan un papel determinante en las mismas y una de ellas es la C.
Según importantes estudios, este nutriente es determinante para la formación de colágeno y para evitar que el cartílago de la rodilla y de otras articulaciones se deterioren. El colágeno es una proteína que el cuerpo usa para producir la piel, los tendones, los ligamentos y los vasos sanguíneos.
Se recomienda consumir al día 75 miligramos como mínimo. Debido a que el cuerpo no produce vitamina C, necesita obtenerla de la dieta y, por este motivo, es determinante la ingesta de frutas cítricas, tomates, pimientos, repollo, brócoli y espinacas. Este nutriente también está disponible como suplemento oral, generalmente en forma de cápsulas y tabletas masticables.
Además de la vitamina C, existen alimentos que pueden colaborar igualmente a fortalecer las articulaciones. En la lista se destacan, por ejemplo, las semillas de lino, le jengibre, el ajo y la carne de pescado, que además es una gran fuente de proteína.
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