Semillas no certificadas aumentan la informalidad en el sector sojero

La informalidad en el sector de semillas de soja en Paraguay costó US$ 284 millones en el año 2013, de acuerdo con el primer in­forme nacional elaborado por la Asociación de Productores de Semillas del Paraguay, Aprosemp. Esta suma estimativa represen­ta el 5% del valor de las ex­portaciones de soja de ese año.

La informalidad en el sector de semillas de soja en Paraguay costó US$ 284 millones en el año 2013, de acuerdo con el primer in­forme nacional elaborado por la Asociación de Pro­ductores de Semillas del Paraguay, Aprosemp. Esta suma estimativa represen­ta el 5% del valor de las ex­portaciones de soja de ese año.
El costo de la informali­dad está compuesta por los US$ 272 millones que deja­ron de percibir ese año los productores debido al bajo rendimiento de las semillas no certificadas, más los US$ 3,6 millones que en forma directa dejaron de recibir los semilleristas legales, los US$ 7,4 millones que dejaron de percibir los ob­tentores y los US$ 330.000 que no tributó el Senave.
“Nos percatamos que los productores no ven un be­neficio usando la semilla certificada, entonces ese es un aspecto que tenemos que reforzar como agre­miación”, observó Roberto Lang, presidente de Apro­semp.
COSTOS DE LA
INFORMALIDAD
Añadió que los costos de la informalidad fueron más elevados en los años en los que la tasa de utilización de semillas certificadas fue­ron más elevados, así tam­bién en los años en los que los precios internacionales de la soja han sido altos.
“A pesar del fuerte posi­cionamiento de la soja para­guaya a nivel internacional, las empresas semilleristas y los obtentores, que son la base del crecimiento, no pueden desarrollar todo su potencial”, dijo.
Trabajando en la infor­malidad, los productores buscan bajar los costos de producción. La bolsa de semillas propias tuvo un precio de US$ 28 en el 2013, mientras que la bolsa de se­millas certificadas tuvo un precio de US$ 39,5 ese año.
El uso de semillas no cer­tificadas tiene sus con­secuencias a la hora de la cosecha, ya que las semillas certificadas rinden un 10% más, añadió Roberto Lang. Recordó que la legislación permite a los productores producir su propia semilla y que este factor impide que Paraguay supere la tasa de adopción de semillas certi­ficadas que es del 37%.
VALORES DE EXPORTACIÓN
El 2013 fue el último año en el que se batieron ré­cords en cuanto a valores de exportación de granos. Ese año, Paraguay exportó granos de soja por valor de US$ 5.800 millones. En 2014 los envíos de granos de soja alcanzaron apenas US$ 2.400 como conse­cuencia de la caída inter­nacional de los precios y una mayor industrializa­ción de los granos.
En Paraguay se siembran más de 3.200.000 hectá­reas de soja. El presiden­te de Aprosemp destacó que muchos semilleristas aprovecharon ese auge de los precios internacionales para realizar inversiones en infraestructura a fin de tener una mejor calidad de semillas para los produc­tores.
El camino a seguir es ex­tenso y a medida que se tome conciencia del cos­to de la informalidad en el sector de las semillas, la tasa de adopción de las semillas certificadas pue­de mejorar con el tiempo, concluyó Roberto Lang, presidente de Aprosemp. 5DIAS