Hay regiones donde hubo un nulo avance en los trabajos de siembra, informó la Unión de Gremios de la Producción.
La falta de lluvias está generando un panorama cada vez más complicado en el sector de la soja y crece la incertidumbre a medida de que avanzan los días y no se tienen importantes lluvias. Ya hay un retraso considerable en la siembra; aunque, la situación aún sería manejable si se vienen las precipitaciones, explicaron referentes de la producción agrícola nacional.
Héctor Cristaldo, presidente de la Unión de Gremios de la Producción (UGP), manifestó que la situación a la fecha está complicada y la siembra de soja está muy comprometida. El mapa de suelo muestra que hay un impacto del estrés hídrico y hay una marcada diferencia de lo que era el año pasado. “Estamos en un punto en donde podemos decir que hay retrasos, pero aún el riesgo es manejable y esperamos que vengan las lluvias para que el sector se tranquilice y pueda avanzar con la siembra”, destacó el titular del gremio.
Cristaldo informó que el año pasado el 37% de la superficie nacional de la soja ya se había sembrado hasta el cierre de setiembre; mientras que a esta altura de la presente campaña aún no se está llegando ni al 10%.
Hay avances en algunas regiones, pero no es importante y la gente está cautelosa y no quiere asumir riesgos, explicó. Sostuvo que aún nos encontramos dentro de la época, pero si se atrasa más la siembra se tendrán problemas. Mientras no se normalice será un freno y causará una concentración de la siembra y de la futura cosecha, pero hay máquinas para encarar la situación, explicó Cristaldo.
Señaló que las lluvias más importantes apuntan al 2 y 3 de octubre y todavía da el tiempo para trabajar con las variedades tempraneras, pero si no llegan habrá muchas complicaciones. “En la medida de que salgamos de la época óptima empezaría a afectar el potencial de rendimiento, pero todavía son especulaciones. Lo real es que no hay una humedad suficiente para encarar la siembra con tranquilidad. Es preocupante porque se va acabando el tiempo”, expresó el presidente de la UGP.
PLANIFICACIÓN
Por su parte, Eno Michels, presidente de la Asociación de Productores de Soja (APS), explicó que teniendo en cuenta la planificación de la campaña agrícola 2019-20 que va hasta julio del 2020, la segunda zafra, en donde siembra maíz y soja zafriña, ya está comprometida porque se va retrasando y entrando a fines de febrero y marzo ya el cultivo estaría en riesgo. Ya está afectando la planificación porque hay riesgo de que la helada tempranera de mayo agarre al maíz y a la soja zafriña, sostuvo.
El presidente del gremio de productores informó que a nivel país las regiones de Itapúa y de Alto Paraná Sur ya están sembrando porque se registraron algunas lluvias, pero en las zonas de Alto Paraná Norte, Canindeyú y San Pedro no hubo avances de la siembra. Expresó que está complicado el panorama y ya hay retrasos en la siembra de soja. En años normales de lluvias los pequeños productores ya estarían terminando la siembra, pero hasta el momento están todas paradas las maquinarias en los terrenos secos, contó el productor.
PREOCUPACIÓN
Productores de varios departamentos del país están preocupados debido a la sequía que se presenta en los últimos días. Alegan que si el clima continúa seco, no podrán iniciar los trabajos de siembra, según el boletín especial de la UGP. “Ya estamos en un año de crisis y no queremos duplicar los problemas, así que esperaremos a que llueva lo suficiente para poder sembrar bien”, expresó Aurio Frighetto, miembro de la Coordinadora Agrícola del Paraguay (CAP). “Estamos aún a tiempo de cultivar; sin embargo, si la sequía continúa va a ser difícil que la semilla germine bien”, sostuvo.
Los agricultores de distintos departamentos productivos del país aguardan grandes cantidades de lluvias para comenzar con la siembra de soja. “Los precios están repuntando y eso es un respiro para el productor; no obstante, necesitamos muchas precipitaciones porque el déficit de humedad en el suelo se arrastra ya desde agosto”, explicó Héctor Cristaldo, presidente de la UGP. Las zonas más afectadas por el estrés hídrico son aquellas que se encuentran hacia el Norte, como San Pedro, Caaguazú y Canindeyú, informó.
RESULTADOS DE LA ZAFRA ANTERIOR
La pasada campaña sojera 2018-19 tuvo resultados poco satisfactorios para el sector productivo y a los bajos precios se sumó una importante merma de la cosecha.
La producción de la oleaginosa se ubicó en torno a las 7,85 millones de toneladas, que representa una caída del 23,5% en comparación a las 10,30 millones de toneladas cosechadas en la zafra 2017-18, según el informe de la Cámara Paraguaya de Exportadores y Comercializadores de Oleaginosas y Cereales (Capeco).
El informe destaca que por culpa de la sequía la producción de soja fue unos 2,4 millones de toneladas inferior a los niveles del año pasado. Por otra parte, el Instituto de Biotecnología Agrícola (Inbio) informó que la superficie de siembra de soja alcanzó unas 3.544.245 hectáreas en la campaña 2018- 19, que representa un leve crecimiento del 0,9% en comparación a las 3.511.143 toneladas sembradas en la campaña anterior.