¿Qué mago se atrevería a realizar un acto de magia de alto riesgo donde su vida y la de sus asistentes esté en peligro sin antes haber previsto todos los detalles de su truco?
Fuente: Sainz de Vicuña, J.M. (2012). El plan estratégico en la práctica. Madrid: ESIC Business & Marketing School Editorial.
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Rodrigo Rojas
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Ningún mago responsable que aprecie la vida de su equipo y valore su disciplina estaría dispuesto a encantar a su público sin antes haber planificado y practicado todas las acciones que lo conducirán a los aplausos, a sabiendas de que un pequeño error podría conllevar consecuencias irreparables.
Con el mismo cuidado de un gran mago, los CEOs, Directores Ejecutivos y Gerentes Generales que comandan las grandes empresas deben prever todos los detalles de la industria en que participan para diseñar el mejor acto capaz de captar la atención y encantar a sus clientes, aprovechando al máximo las oportunidades del mercado y salvaguardando la integridad de su compañía y equipo.
El pensamiento estratégico entendido como la capacidad de reflexionar anticipadamente sobre las variables y situaciones que presentará el mercado y planificar las acciones que realizaremos para crear escenarios favorables para la compañía, es una competencia imprescindible para cualquier manager, pues al igual que Leonardo Da Vinci cerraba sus ojos para visualizar primero todos los detalles de su próxima gran obra, es el pensamiento el primer lugar donde los líderes de la compañía visualizarán cada uno de los pequeños detalles del lugar hacia el que se quieren dirigir, pues de no hacerlo corren el riesgo de desaprovechar las oportunidades del mercado, así como dice el filósofo y político Séneca: “Ningún viento será bueno para quien no sabe a qué puerto se dirige”.
El hábito de pensar en el desempeño futuro de la empresa permite a los líderes de la compañía predecir mejoras a su estrategia de participación, necesarias para no quedar adolorido por los golpes que nos pudiera lanzar el mercado, más aún cuando éste se empecina en cambiar cada día las reglas del juego: tecnologías de la información que eliminan barreras de entrada, canales de venta digitales que modifican la interacción con los consumidores o la creación de “empresas B” emergentes que al considerar en sus procesos productivos el cuidado de las personas y el medio ambiente son capaces de cambiar el comportamiento de consumo de los clientes, son sólo algunas variables que de no ser previstas podrían llevarnos a lo profundo de un océano rojo.
PLANIFICAR EN EMPRESAS MULTINEGOCIO: EL GRAN DESAFÍO
Para muchas empresas multinegocio, la planificación estratégica puede convertirse en un verdadero dolor de cabeza, sobre todo si sus unidades de negocio ofrecen productos y servicios que satisfacen a segmentos muy diferentes entre sí, pues sectorizar el concepto de negocio de tal manera que podamos definir una misión capaz de llenar las expectativas de todos los stakeholders se convierte en un desafío colosal, especialmente para aquellas empresas multinegocio donde nos encontramos a ejecutivos y gerentes altamente comprometidos con su unidad de negocio, pero que por pensar sólo en el crecimiento de su unidad exigen mayor proporción de la asignación de presupuesto y pierden de vista a las demás empresas de la compañía que también contribuyen a la expectativa de sus accionistas.
Planificar para crecer
Si bien para muchas empresas parece costoso realizar su primera planificación estratégica, debido a que requieren de más horas de asesoría externa para realizarla, el beneficio percibido de perseguir objetivos y metas les facilita bastante el monitoreo de resultados y el control de gestión.
Para una empresa que comienza a dar sus primeros pasos en la elaboración de su planificación estratégica podría resultarle más interesante centrar la atención en el análisis de la industria con la esperanza de encontrar océanos azules que puedan explorar con su misma estructura organizacional. Sin embargo, a medida que las empresas más practican la planificación estratégica se vuelcan a la toma de decisiones basada en la información que la misma empresa multinegocio produce a partir de su performance en cada industria.
Un muy buen ejemplo de esto y sin ir más lejos de nuestro querido Paraguay, podemos mencionar el éxito del Grupo Protek, compañía que ha sabido manejar muy bien el ingreso de nuevos rivales internacionales, manteniendo el liderazgo en su industria y siendo capaz de desarrollar fuertes unidades estratégicas de negocio, acompañando de un progresivo crecimiento geográfico hacia Brasil y Argentina y capturando sinergias importantes para el éxito de la empresa a partir de la interrelación entre los distintos segmentos de clientes a los que satisface en el marco de un concepto central llamado “seguridad”.
A modo de sugerencia, para aquellos directores, gerentes y ejecutivos que desean aventurarse en la planificación estratégica de una empresa multinegocio les recomiendo considerar al menos tres cosas: A) Estrategia corporativa de administración del portafolio diversificado, explicitando cuáles serán las bases sobre las cuales se decidirá la asignación de recursos para cada unidad estratégica de negocio, como también las decisiones de aumento de la diversificación, adquisición de otras empresas y desinversión de capital; B) Estrategia de las unidades de negocio, diferenciada por atributos de marca, soluciones y target de explotación; y C) Estrategia de generación de sinergias entre las unidades de negocio, principalmente a través de la instalación de procesos que permiten compartir conocimientos, comportamientos y recursos de todo tipo.
Aun teniendo en cuenta estas sugerencias, no debemos olvidar que una buena planificación no sirve de nada sin una buena implementación, pues al final del día lo que se reflejará en los números será lo que hacemos y no lo que pensamos. 5DIAS
ALMOR PARAGUAY.
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