Es el segundo recorte efectuado por el organismo multilateral, desde el 4,2% pronunciado a fines del año pasado. El BCP mantiene la confianza en sectores energético, industrial y construcciones.
A pesar de los indicios de mayor dinamismo que mostró la economía paraguaya en el arranque del segundo semestre, las expectativas para el desempeño global del año se siguen desinflando.
El Fondo Monetario Internacional (FMI) ajustó a 1% la proyección de expansión del producto interno bruto (PIB) de Paraguay para el 2019, muy por debajo de los índices de 4,2% y 3,2% pronosticados meses atrás, y también en un nivel inferior al 1,5% previsto por el Banco Central del Paraguay (BCP).
Para el 2020, el FMI estima una recuperación de 4%, en línea con el crecimiento potencial del país. Estos pronósticos integran el informe de Perspectivas Económicas Globales (WEO, por sus siglas en inglés) correspondiente a octubre, lanzado en ocasión de las reuniones anuales del FMI y el Banco Mundial.
Miguel Mora, economista jefe del BCP, explicó que estos ajustes, efectuados también por otros multilaterales y el sector privado local (ver infografía), se relacionan con el combo generado por la caída mayor de la esperada del PIB durante el primer semestre de 2019 y la débil recuperación registrada en lo que va de la segunda mitad del año.
Recordó que inicialmente se había previsto que el impacto de la sequía se constituyera en una caída de 13% de la producción de soja, pero terminó siendo de 23%. A esto se sumó la persistencia de los efectos de la sequía en el cauce del río Paraná, que produjo una drástica reducción de la generación de energía eléctrica de las binacionales.
Mora aseguró que desde julio se está viendo una recuperación de la economía y que la campaña sojera 2019/2020 va a impactar ya en el crecimiento del presente año, mientras que informaciones preliminares dan cuenta de que las binacionales estarían presentando una variación positiva desde los números de setiembre.
Además, si se suma el mayor desembolso que se está destinando a las obras públicas y con el que están mejorando los indicadores de la construcción, sostuvo que se puede sostener una tasa de crecimiento positiva para el cierre del año. En este punto, consideró importante el desempeño que pueda darse en el sector manufacturero y que logre recuperarse hacia finales del año, principalmente por los efectos secundarios derivados del avance de las obras públicas y privadas en la demanda de insumos utilizados en la construcción.
De enero a junio de 2019, el PIB cayó 2,5%, según registros oficiales. La actividad económica, por su parte, arrojó un incremento interanual (comparativo con mismo mes del anterior) de 0,7% en julio y 0,8% en agosto.
En cuanto a la inflación, el FMI espera que los índices cierren en 3,5% en 2019 y en 3,7% en 2020, en ambos casos por debajo de la meta de 4% del BCP. Para el desempleo, prevé que aumente a 6,1% este año, desde el 5,6% en que se fijó en 2018, y que descienda a 5,9% el año que viene.
El ente redujo también la proyección de crecimiento mundial para el 2019, a 3%, y a 3,4% para el 2020.
Perspectiva del mercado sigue en baja
Los agentes económicos bajaron de 1,3% a 0,9% la estimación de expansión del PIB para el cierre del 2019, con lo cual el pronóstico queda aun más por debajo del 1,5% que maneja el BCP (con sesgo a la baja) y lejos del 4% que se anunciaba a fines del 2018. Para el 2020, también se recortó la proyección, de 3,5% a 3,3%, y la cifra se aleja cada vez más del índice de crecimiento potencial del país, de 4%. En cuanto a la inflación, ajustaron de 3,5% a 3,3% el índice esperado para el cierre del corriente año y se mantiene en 4% el pronosticado para el 2020. Para este mes y el siguiente, prevén que la variación mensual esté en 0,2% y 0,3%. Estos datos fueron recogidos por el BCP en su Encuesta de Variables Económicas (EVE) de octubre. UH