Paraguay encabeza ampliación de la clase media en América Latina
20 Jul 2016
La Nacion
El Programa de las Naciones Unidas para el Desarrollo (PNUD) también encontró una acelerada reducción de la pobreza en nuestro país, que pasó del 44% al 20% entre el 2013 y 2014.
El Informe de Desarrollo Humano (IDH) 2016, presentado por el economista en jefe del PNUD para América Latina y el Caribe y coordinador y autor principal del material, George Gray Molina, destaca a Paraguay principalmente por dos factores; primero, el vertiginoso ritmo de ampliación de la clase media, considerado el más rápido de Latinoamérica, al pasar del 18% en el 2004 al 38% en el 2013, lo que representa un crecimiento del 20% en nueve años; segundo, un ritmo bastante acelerado de reducción de la pobreza, que descendió del 44% al 20% entre el 2013 y 2014, lo que significa un 24% menos.
En conversación con La Nación, Gray Molina explicó que identificaron tres factores importantes para la reducción de la pobreza y la ampliación de la clase media en nuestro país; primero, el ingreso laboral, que se incrementa, sobre todo en el sector de servicios de economía, teniendo un efecto clave al implicar alrededor del 50% de reducción de la pobreza; segundo, las transferencias sociales, ya sean directas o pensiones no contributivas, que implican el 25% del efecto; tercero, el cambio demográfico, que supone inserción de jóvenes y de mujeres al mercado laboral formal. “Estos factores explican gran parte del aumento de la clase media y de la reducción de la pobreza en Paraguay”, subraya el economista.
Recordemos que días atrás La Nación publicó un reportaje sobre la población mayoritariamente joven de Paraguay –fenómeno del bono demográfico–, que da lugar a más trabajo y a más crecimiento económico. Según especialistas en demografía y ordenamiento territorial, para el 2050 aproximadamente, 7 de cada 10 paraguayos estarán en edad productiva, por lo que nuestro país debe aprovechar la oportunidad para pegar el salto hacia el desarrollo, invirtiendo, hoy, en mejor salud y educación.
Posición actual
Conforme a Gray, entre las naciones de la región que tienen mayor reducción de la pobreza, Paraguay se ubica en quinto lugar, solo por detrás de Ecuador, Bolivia, Perú, entre 18 países; en lo que respecta al aumento de la clase media, Paraguay es el número uno en crecimiento a nivel latinoamericano.
A estos se suma el hecho de que el 47% de la población paraguaya tiene movilidad ascendente en sus ingresos, pero hay un dato no menor, inclusive en el mejor de los años, un 17% de la población tiene movilidad descendente. “Esto es simultáneo, no son diferentes grupos, sino que cuando un grupo está saliendo de la pobreza, otro está regresando”, detalla el economista.
En este escenario, el PNUD ve un reto que llama de “resiliencia” –capacidad que tiene una persona para superar circunstancias adversas o traumáticas–, considerando que se debería construir resiliencia a nivel de los hogares y de los propios individuos, ya que por un lado está blindar la economía o la macroeconomía –en manos del Banco Central en base a una política fiscal o monetaria–, y por otro, blindar el bienestar de las personas vulnerables, pobres y de aquellos que ingresan en la clase media. “Para lograrlo, hacen falta políticas públicas”, añade Gray.
Blindaje social
El organismo identificó cuatro factores para el blindaje; primero, protección social a lo largo del ciclo de vida; segundo, sistema de cuidados para niños y personas mayores, de vital impacto e importancia en Paraguay conforme a Gray, ya que encontraron que esta es la intersección de los incentivos de mayor inserción laboral de la mujer, ya que nuestro país todavía tiene una brecha de 29% en relación a la población masculina y femenina en el mercado laboral, a pesar de que está disminuyó en los últimos tiempos.
“Es una de las brechas más grandes en América Latina. A parte de la brecha en número, también hay diferencias en el uso de tiempo, las mujeres dedican tres veces más tiempo al trabajo no remunerado, y finalmente está la diferencia salarial, que es todavía significativa entre hombres y mujeres”, precisó el economista.
El tercer factor es el acceso a activos, como tener una vivienda, un automóvil, o una cuenta en un banco, esto hace más posible amortiguar un choque e ir construyendo un patrimonio, sobre todo para personas vulnerables o que están pasando a la clase media. A criterio de Gray, además de estos factores, es importante la calificación laboral, que debe ser un tema permanente.
Factores laborales
Hace 20 años, el centro de gravedad de la política pública estaba, sobre todo, en temas de necesidades básicas, hoy, con esta transformación social, el centro gira más en torno a las necesidades laborales de la población.
“El mercado laboral es el futuro para la reducción de la pobreza, de allí que la reflexión más grande que tenemos es que, se requieren más políticas de acción para la inserción laboral de jóvenes y mujeres, además de seguir expandiendo la calificación laboral de todos los trabajadores, esta es una agenda estructural a largo plazo”, finalizó Gray.
“Cuando un grupo está saliendo de la pobreza, otro está regresando”.
“Se requieren más políticas de acción para la inserción laboral de jóvenes y mujeres, además de seguir expandiendo la calificación laboral de todos los trabajadores”.