El ministro de Hacienda de Paraguay, Benigno López, defendió hoy la solidez de la economía de su país frente a la volatilidad de Brasil y Argentina, que consideró que es una cuestión “que no termina de resolverse”.
“Paraguay no es ajeno a lo que pasa en la región y en el mundo. Hay una desaceleración mundial que se explica por diversos factores que a nosotros nos afectan, y sobre todo las cuestiones argentina y brasileña, que no terminan de resolverse”, dijo López en una entrevista con Efe en la sede del Banco Mundial, en Washington.
El ministro hizo estas declaraciones después de que el Fondo Monetario Internacional (FMI) publicase este martes el informe “Perspectivas Económicas Mundiales”, en el que fijó sus previsiones de crecimiento del producto interior bruto (PIB) de Paraguay en el 3,5 %, 7 décimas menos que en el documento de octubre de 2018.
“La lectura del FMI es correcta y realista. (…) Es un barrio complicado el nuestro, pero así ha sido siempre y, a pesar de estas previsiones, Paraguay va a seguir creciendo y a niveles importantes dentro de la región”, consideró López.
El titular de Hacienda argumentó que la actual contracción de Argentina, que el FMI espera que sea del 1,2 % este año, va a afectar “fundamentalmente” al sector comercial paraguayo y a los negocios en la frontera entre ambos países.
“Sus políticas han resultado en una devaluación importante de la moneda argentina que, a diferencia de la paraguaya, que se mantiene con cierta fortaleza, genera una diferencia de precio por cuestiones cambiarias”, explicó.
Sin embargo, López pronosticó que la situación “va a ir temperándose en el tiempo” y precisó que la situación se va a corregir “a finales del primer semestre de este año”.
Durante su participación en la asamblea de primavera conjunta del FMI y del Banco Mundial (BM), López ofrecerá una charla sobre capital humano junto a la directora ejecutiva del BM, Kristalina Georgieva, y el ministro de Hacienda de Nueva Zelanda, Grant Robertson, entre otros.
Asimismo, se reunirá con el recientemente elegido nuevo presidente del BM, David Malpass, que llegó a la institución multilateral después de la dimisión de su antecesor, Jim Yong Kim, a principios de este año.
López indicó que el éxito de la economía paraguaya en los últimos años respecto a otros países de la región se explica gracias a un fisco “responsable” a la hora de gastar y diseñar políticas públicas eficientes.
“El Banco Central paraguayo ha mantenido su independencia y estabilidad y ha podido intervenir oportunamente en la política monetaria sin alterar las condiciones de mercado, estableciendo las metas de inflación”, agregó.
Esta estrategia ha provocado, según López, que Paraguay “genere condiciones para que el sector privado continúe creciendo”.
Sobre la reforma fiscal que el Gobierno de Mario Abdo Martínez presentará al Congreso paraguayo en mayo, López insistió en que es un momento “importante” para blindar las políticas públicas a largo plazo.
“No hemos sido lo suficientemente exitosos en las políticas sociales. Seguimos siendo un país muy desigual, con una base tributaria injusta, ya que no es equitativa”, reconoció.
López aseguró que la reforma fiscal “no va a sacar el encanto que tiene Paraguay con bajos impuestos y costes, y competitivo”, sino que va a corregir “algunas anomalías” para que “los que ganen más, paguen más”.
El FMI pronosticó hoy que la economía de Latinoamérica crecerá un 1,4 % en 2019 y un 2,4 % en 2020, una rebaja de seis y una décima respecto a las cifras estimadas en enero, por el empeoramiento de las previsiones de México y Brasil y la profundización de la crisis venezolana.
Alex Segura Lozano – EFE