Si no se regula el uso que los niños hacen del teléfono móvil, pueden terminar por desarrollar una dependencia al mismo.
La “Nomofobia” es una palabra que deriva del término anglosajón ‘no mobile phone phobia’, es decir, que designa al miedo a estar sin el teléfono móvil. Esto es considerado una patología del siglo XXI asociado a la tecnología.
“Es muy importante por esta razón limitar a los pequeños el uso del internet, o de las pantallas para que no llegue al punto en el que quede mas difícil controlarles volviéndose adicto al consumo de los jueguitos, videos o dibujitos”, aconsejó el doctor Robert Núñez.
Principales síntomas de la nomofobia
*El niño dedica una gran parte del tiempo a utilizar el celular. Podría considerarse que cuando el uso excede las cinco horas diarias nos encontramos ante un problema, aunque es necesario tener en cuenta otros factores.
*Se muestra irritable, inquieto, agresivo o ansioso cuando no puede utilizar el móvil o conectarse a internet. Generalmente, esto sucede porque el menor teme perderse lo que ocurre o de no enterarse lo que hablan sus amigos o lo que sucede en las redes sociales.
*Existe una tendencia al aislamiento y al retraimiento. Si tu hijo prefiere estar con su tableta o teléfono en lugar de salir a socializar con sus amigos, compañeros o familiares, has de mantenerte alerta.
*Esta dependencia hacia el teléfono móvil impacta negativamente su rendimiento académico o en el cumplimiento de otras obligaciones. El niño no rinde porque dedica una excesiva atención al mundo virtual.
*Poder acceder a la tecnología y utilizarla se ha convertido en una prioridad. Es decir, que el menor se niega a acudir a lugares sin cobertura o a los que no pueda llevar su teléfono e incluso, ha abandonado hobbies o aficiones en pro de pasar más tiempo en internet.
*El sueño se ve afectado, ya sea por la aparición de insomnio o de insuficientes horas de descanso por el uso nocturno del dispositivo.
Cómo evitarla
* Controlar las horas que se les da el móvil o la computadora.
*Compartir mas con ellos jugando al aire libre.
*Hacer que ayude en la casa con labores pequeñas.
*Jugar con ellos con juguetes didácticos.
*Otras actividades didácticas.
“Los niños necesitan sentirse importante en el hogar y no necesitan buscar esa necesidad en el móvil o cualquier otra pantalla para sustituir. Como adultos, padres, tenemos esa responsabilidad de cuidar de nuestros pequeños”, puntualizó el pediatra.
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