Hace 10 años, a raíz de una terrible negligencia médica, un paciente pediátrico con cáncer se contagió de VIH durante una transfusión de sangre.
El abogado Rolando Villar, quien representa a la familia de un niño que se infectó de VIH en el Instituto Nacional del Cáncer, comentó al canal GEN que se corroboró que el virus fue transmitido por una transfusión de sangre al no cumplirse con el protocolo (analizar primero la sangre).
De acuerdo a los antecedentes, al niño le diagnosticaron cáncer a los 4 años, en el 2011, en ese entonces le practicaron la transfusión de sangre, pero recién en agosto del 2019 la familia se enteró que el menor tenía VIH tras unas pruebas que le practicaron para otra cirugía que debía hacerse. Se corroboró que su entorno familiar no estaba infectado y tampoco el menor sufrió algún abuso sexual.
“Son siete personas involucradas. Procesalmente se terminó la junta médica, la impericia fue por la metodología, no se utilizó la técnica correspondiente y no se hizo el protocolo de ventana. Así de sencillo le cagaron la vida a este pendejo”, sostuvo Rolando Villar.
El entrevistado precisó que el adolescente está con descalcificación y tuvo una intervención quirúrgica molar recientemente. “El niño está precisando un medicamento de elevado costo. Entre ayudas solidarias estamos resistiendo”, agregó.
Villar indicó que a consecuencia de la actual huelga de los funcionarios de la fiscalía no están pudiendo avanzar con el caso, por lo que no pueden solicitar la indemnización. “El Estado paraguayo debe hacerse cargo, ya que demostramos con pruebas cuál fue la causa”, esgrimió.
Ante la falta de respuestas, el abogado anunció más movilizaciones para exigir a las autoridades tomar riendas en el asunto. Una de las medidas será la instalación de una carpa de la resistencia frente al Congreso Nacional.
“No se puede descuidar así y fundir la vida de alguien por no hacer un mero protocolo”, remarcó Villar.