Masi sostiene que proceso a Dilma afectará al Paraguay
Si de por sí la situación económica en Brasil es complicada sin crisis política, con el juicio político probablemente se retarde un poco más las medidas que conduzcan a reducir el déficit fiscal y a alentar el mejoramiento de sectores competitivos para asegurar un mayor crecimiento, señaló ayer el economista Fernando Masi. Fue al hacer un análisis de cómo afectará a Paraguay la decisión del Parlamento brasileño de aprobar el juicio político a la presidenta Dilma Rousseff.
Fernando Masi, analista.
Masi explicó que independientemente de quién asuma mientras dure el proceso no tendrá la tranquilidad para tomar decisiones de política económica, que preparen al país para un crecimiento económico no este año, sino el próximo. “Brasil tiene dos problemas gruesos: Uno que tiene que ver con el crecimiento económico, porque está en recesión; y otro con el déficit fiscal”, comentó.
DÉFICIT. Al referirse al déficit fiscal, apuntó que las políticas orientadas a su reducción son delicadas (pueden aumentar la inflación y limitar la actividad privada). Indicó que de tomar el camino que priorice a sectores competitivos, significará aplicar políticas fiscales expansivas (al otorgarle ciertas ventajas fiscales), lo cual va en contra de la reducción del déficit fiscal. No obstante, dijo que el crecimiento de este sector beneficiará a nuestro país, pues habrá mayor demanda de bienes de capital.
Masi cree además que deben mantenerse los programas sociales, aunque significan mayor erogación. “Es una ecuación un poco difícil, en donde tanto los sectores económicos competitivos como los programas sociales tienen que ser afectados de una manera balanceada, para hacer que el déficit fiscal no influya negativamente sobre la marcha de la economía”, expresó.
Recordó que el 50% de nuestras importaciones provienen del Mercosur, específicamente de Brasil y Argentina, principalmente de bienes de capital e insumos que sirven para apoyar la producción paraguaya. Indicó que el no crecimiento de Brasil afecta negativamente a Paraguay, porque significa que existe menos demanda de los productos paraguayos que van al país vecino.
LEITE. Ya la semana pasada, el ministro de Industria, Gustavo Leite, reconocía que la situación económica en el Brasil repercutía en Paraguay, según un cable de la agencia AFP. Ello, atendiendo a que en los dos últimos años se instalaron 55 industrias de capital brasileño. “No es ningún secreto que Paraguay tiene una frontera muy vibrante con el Brasil. Hay negocios ligados a la compra del cliente brasileño y esa compra está hoy casi muerta”, dijo Leite.