Los empresarios piden continuidad de los aciertos económicos
El grupo más representativo del empresariado nacional se reunió en un foro especial, analizó la situación de la economía del país y exhortó a las autoridades a un diálogo entre los diversos sectores de la comunidad nacional para encarar el futuro. Resaltó los logros alcanzados hasta ahora en el Paraguay y solicitó numerosas medidas en el sector fiscal para mejorar el futuro inmediato, en un mensaje sobre todo dirigido a las próximas autoridades que tomarán el mando en agosto venidero. Pidió que se continúe con los aciertos que ha tenido este Gobierno y se encaren los asuntos que todavía hay que mejorar.
El Foro Empresarial destacó los principales logros alcanzados por la actual administración estatal y propuso que el gobernante que asuma luego de las elecciones de abril continúe con el camino recorrido por este Gobierno. El presidente de la Feprinco y orador principal puso de resalto claramente dos aspectos fundamentales de la economía paraguaya, que se han conquistado durante la administración Cartes: la estabilidad macroeconómica, que es la envidia de muchos, y la gran inversión en infraestructura realizada, muy superior a la de gobiernos anteriores, e histórica en la vida del país.
Por supuesto, los empresarios desean que esas dos grandes conquistas se mantengan y consoliden en el próximo gobierno para garantizar el progreso del país. El sector privado sabe que ningún esfuerzo de las empresas puede ser fecundo con alta inflación, tipos de cambios inestables, intranquilidad social o inseguridad jurídica y sin inversiones.
Por eso enfatizaron en la necesidad de priorizar la inversión en infraestructura dentro del gasto público, el apego a las leyes, el respeto a la institucionalidad y no a la corrupción, que son las grandes banderas que ha desplegado el Ejecutivo en su política nacional. Propusieron que desde el Estado se debe asumir el compromiso formal de pelear contra la corrupción, el prebendarismo y el clientelismo, que son males endémicos de nuestra sociedad nacional, que desde la más alta estructura del Gobierno se ha combatido fuertemente con la aplicación de leyes que antes no existían o no se cumplían.
Una de las solicitudes del empresariado fue que el equilibrio fiscal no debe apalancarse solo en el incremento del ingreso, sino también en una reorientación del gasto público. Sostiene que se deben priorizar la inversión en infraestructura, la conectividad, la tecnología, internet, salud, educación, vivienda y seguridad.
Otra de las preocupaciones de los hombres de negocio también ha sido el control del gasto estatal, para que se les dé un mejor uso a las recaudaciones.
La lucha del Poder Ejecutivo en los últimos años fue justamente la mejora del gasto público, haciendo que el dinero recaudado no se use solamente para los salarios cada vez más abultados de los empleados estatales, a fin de que pudiera disponerse de más plata para las inversiones sociales.
Un ejemplo de esa pelea por la mejora del gasto público pudo verse en el quinquenio que vivimos. En los últimos años, cada vez que se tuvo que estudiar el Presupuesto General de la Nación los políticos, más preocupados por sus intereses partidarios o de grupo, hicieron trizas del interés nacional. Eso pudo verse en el Congreso, cuando, contra los pedidos del Gobierno central, aumentaron siempre el gasto público en salarios y afines en desmedro de los fondos que deberían destinarse a las inversiones.
Hacer que en el balance de las finanzas del país pesen igual los haberes que las deudas, lo que se llama equilibrio fiscal, siempre fue una obsesión del Ministerio de Hacienda. Mediante ello nunca se sobrepasó los límites establecidos por la Ley de Responsabilidad Fiscal, que es el marco legal que rige para sustentar la armonía de las finanzas del Gobierno.
A pesar de todo lo que se ha venido logrando en estos últimos años, en nuestro país hay todavía mucha tarea por hacer. Por eso la opinión de los empresarios, que son los que invierten para producir y mover la economía, es muy útil y sus recomendaciones son válidas, si queremos seguir creciendo como país.
LN
