Las lluvias que azotan desde hace 15 días la rica pampa húmeda argentina ponen en duda que se cumplan las estimaciones de la cosecha de soja en el 2016, coincidieron el lunes fuentes bursátiles. “La apacible marcha hacia otra cosecha de soja en torno de los 60 millones de toneladas, como el año pasado, quedó súbitamente en suspenso”, indicó un informe de la Bolsa de Cereales.
En igual sentido, la Bolsa de la ciudad de Rosario (al norte), el mayor polo agroindustrial del país, señaló que “las lluvias y lloviznas producidas desde poco después de iniciado abril han retrasado sensiblemente la cosecha de soja”. La soja es el principal “commoditie” agrícola del país sudamericano. Argentina es el mayor exportador mundial de aceite y harina de soja, y el cuarto proveedor global de maíz. Consultores privados calculan que de los 22.700 millones de dólares que se preveían recaudar por exportaciones de soja este año, la cifra podría bajar hasta los 20.700 millones. Los productos agrícolas representan un tercio de las ventas externas anuales de la tercera economía latinoamericana.
Campos anegados o con alta concentración de humedad se observa en la “zona núcleo”, la más productiva, en las provincias centrales de Buenos Aires, Córdoba, Santa Fe, Córdoba y Entre Ríos. LA NACION