MECÁNICA. Shirley mostrando parte del motor de un auto que va a reparar.
VALÉ. Asegura que le encanta todo lo relacionado al automóvil y sueña con algún día abrir su propio taller
FERNANDO DE LA MORA. Ver a una mujer trabajar en algún taller es algo que a muchos les llama la atención. Le es hasta incluso algo “raro”. Pero Shirley Osorio es una de las tantas kuña mbarete que rompe todo tipo de esquema. Con tan solo 18 años, la joven sueña con llegar a tener su propio taller mecánico y así reparar todo tipo de vehículos que puedan llegar a su negocio.
“El año pasado terminé el colegio y dije que iba a estudiar para ser mecánica. Siempre me gustó. Y ahora que todos los autos vienen con parte eléctrica más sofisticada, por eso ahora estudio electricidad del automóvil y después una vez que culmine empiezo para ser mecánica”, contaba la jovencita.
Resaltó que cuando le contó la idea a su mamá, de querer estudiar para ser mecánica, no se opuso sino que hasta incluso le dio todo su apoyo para poder llegar a su meta anhelada.
Shirley contó que ahora solo desea encontrar un lugar donde pueda ir a practicar lo que aprende en su casa de estudio, Kolping, y así poder aprender más y tener cancha en el mundo automotriz una vez que se reciba.
“A mi curso me voy de 16:00 a 21.00 horas. En marzo empecé y dura 5 meses. Lo que ahora quiero es tener un taller cerca para poder ir a trabajar y así también practicar todo lo que aprendo, para poder perfeccionarme y ser una gran profesional el día de mañana”, decía la futura mecánica.
OPORTUNIDAD
Resaltó que es para ella es más que un simple trabajo, ya que es una gran oportunidad laboral.
30 ALUMNOS
Son en total, pero Shirley es la única mujer entre los varones que van al curso. Aseguró que muchos se sorprendieron con su presencia.
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