Justo Pastor Cárdenas, extitutlar del Indert, será enviado a la penitenciaría Nacional de Tacumbú por su imputación por los hechos punibles de enriquecimiento ilícito en la función pública y lavado de dinero.
“El dictamen de Contraloría salió a favor mío, creo que no hay nada más que discutir. Esperamos con fe y confianza que la justicia se haga presente”, dijo Cárdenas, intentando ocultar sus esposas, tras la audiencia de imposición de medidas y mientras esperaba la resolución del juez Rolando Duarte, según informó Perla Silguero, periodista de ABC Color.
Cárdenas fue imputado el 23 de noviembre por la fiscala Natalia Fúster, por el hecho punible de enriquecimiento ilícito y lavado de dinero. También fueron imputados sus hijos, Justo Cárdenas Pappalardo, María Alexandra Cárdenas Pappalardo y Alan Cárdenas Rodríguez, por lavado de dinero.
La investigación pone al descubierto que existe un monto de G. 2.644 millones que no podría justificar y se sospecha proviene de fuentes ilícitas. Entre el 2008 y 2018, Cárdenas tuvo tuvo un ingreso de G. 5.364.894.000, pero sus egresos fueron por G. 8.009.595.082.
Otros datos que llamaron la atención fueron las compras de vehículos por parte de la familia de Cárdenas. Solo en vehículos gastaron G. 1.114 millones, mientras que en inmuebles otros G. 1.292 millones en los últimos años.
Además, solamente en compra de acciones en la Agroindustrial Ganadera JPC, Cárdenas junto con sus hijos tienen invertidos G. 3.050 millones. Incluso, hasta su difunta madre aparece como accionista de la compañía.
También tiene una estancia en Pirayú, que está valuada en aproximadamente US$ 3 millones. El salario de Cárdenas era de G. 32 millones al mes, por lo que, para comprar esa propiedad, necesitaría más de 74 años con ese sueldo.
En tanto, sus tres hijos fueron imputados por considerar que la actuación de los mismos contribuyó a ocultar los movimientos irregulares de Cárdenas.abc