La falta de equipamientos en las fronteras y las diversas estrategias adoptadas por los narcotraficantes para burlar los controles hacen de Paraguay un país de libre tránsito de droga, según admitió Zully Rolón, ministra de la Secretaría Nacional Antidrogas (SENAD).
La titular de la SENAD participó del programa “Fuego Cruzado” del canal GEN y manifestó que tuvieron conocimiento del cargamento de cocaína hallado en el puerto de Hamburgo el pasado 12 de febrero cuando las autoridades alemanas hicieron algunas verificaciones a raíz de presuntas irregularidades en el contenedor.
A partir de allí, se llevó a cabo una inspección que posteriormente derivó en el hallazgo de 16 toneladas de la droga, distribuidas dentro de latas de pintura de una marca paraguaya.
Rolón sostuvo que cargamentos de esta envergadura pueden salir del país, burlando los mecanismos de control, gracias a que el crimen organizado “tiene una estructura financiera muy importante” y también debido a que buscan estrategias para evadir a las autoridades, como por ejemplo creando empresas de fachada para enviar productos.
Una de las hipótesis que se manejan es que las latas de pintura en las que fue alojada la droga ya estaban cargadas previamente y fueron embarcadas a otro destino. “El tema de la triangulación es uno de los (mecanismos) más utilizados, también está la contaminación en tránsito”.
La ministra antidrogas admitió que estamos con las fronteras “vulnerables” debido a la falta de radares en las fronteras y escáneres en los principales puertos del país. Los pocos que están disponibles se encuentran sin mantenimiento y ya están desfasados, añadió.
Para tratar de paliar esta situación, están trabajando de cerca con las autoridades de Bolivia buscando replicar el mismo sistema de radares que se encuentra desplegado en sus fronteras terrestres, el cual fue posible gracias a una millonaria inversión del gobierno.
“Si es que permanentemente se contaminan nuestros contenedores, no vamos a tener la misma confianza”, afirmó Rolón, refiriéndose a la posibilidad de que los cargamentos que parten de suelo paraguayo sean adulterados y lleguen a destino con droga.
Rolón considera que Paraguay, de momento, aún es considerado como un país de tránsito de cocaína y por ahora no puede ser tenido en cuenta como un centro de acopio. En igual sentido, aseguró que todavía no somos productores de la droga debido a que no existen plantaciones de coca en suelo paraguayo, aunque sí puede llevarse a cabo un trabajo de procesamiento o disolución para bajar la pureza.
Admitió que trabajan de muy buena manera con la Policía Federal del Brasil para el combate al narcotráfico, además de contar con el apoyo permanente de la Embajada de Estados Unidos en Paraguay mediante el programa del SIU (Unidad de Información Sensible, por sus siglas en inglés), recibiendo constantes capacitaciones para el personal operativo.
Uno de los problemas que podrían presentarse a futuro es la conversión de la Ruta Bioceánica en la nueva “ruta de la droga”, esto si es que no llegan a instalarse escáneres en sus principales puntos. Para la ministra, esto se estaría evitando con la adquisición de nuevos equipamientos, proceso que ya está en curso. HOY