Con un control encabezado por un solitario funcionario -que poco o nada revisa bajo el tinglado aduanero- el paso fronterizo Foz de Iguazu-Ciudad del Este parecía “zona liberada”, en la mañana del lunes, según informe de Gustavo Galeano para La Nación.
Como Jorge Antonio Pelozo fue identificado el representante de la Dirección Nacional de Aduanas que se encontraba como responsable. Al notar la presencia de la prensa se procedió a detener a algunos vehículos pequeños. Todos los furgones fueron desviados hacia el tinglado, en zona de la Aduana. Allí, según denuncias de microcomerciantes, es donde se coacciona para la obtención de “coimas”. El reportero fue cuestionado durante su labor por uniformados de la Marina, a los que respondió que realizaba su tarea en la zona como es habitual.
Durante los controles fueron requisadas algunas zapatillas y carne que iba a ingresar de manera irregular. Rodrigo Alderete, representante de la Asociación de Avicultores del Paraguay (Avipar), en Alto Paraná, había denunciado con anterioridad que continúa el ingreso masivo de pollo de contrabando.
Seguimiento al Operativo Brillante
El viernes -según informes recogidos por el corresponsal- Emilio Fuster, actual coordinador ejecutivo de la Unidad Interinstitucional para la Prevención, Combate y Represión del Contrabando (UIC), estuvo en la zona. El equipo estuvo verificando la Administración de Aduanas de Ciudad del Este y Presidente Franco. Varias son las pequeñas embarcaciones que pasan desde Puerto Iguazu al Alto Paraná. El ex fiscal estaría realizando seguimiento del Operativo Brillante, que desembocó en la desarticulación del Departamento Técnico Aduanero de Vigilancia (Detave).