Fin del secreto de Estado: aparece responsable de la Quinta Nápoles
Un comerciante del rubro de los repuestos fue beneficiado con la explotación de la quinta Nápoles que pertenece a Reinaldo Cucho Cabaña y que ahora pasó al dominio estatal a través de la Senabico. Según el encargado ya invirtió G 120.000.000 en el reacondicionamiento del lugar.
Por recomendación de un cliente, Miguel Ayala Florentín, propietario de una casa de repuestos en la ciudad de Capiatá, inició los trámites para arrendar el establecimiento construido a semejanza de la legendaria Hacienda Nápoles, propiedad del fallecido traficante Pablo Escobar Gaviria.
En comunicación con Radio Ñandutí, Ayala relató que tras la presentación de la carpeta poco después de navidad, tuvo un par de entrevistas y luego se abordó lo referente a los términos del contrato, el responsable del establecimiento se compromete a pagar por el alquiler por tres años y corre con los gastos de reacondicionamiento del lugar.
La Senabico fijó un precio de G 10.000.000 mensuales para la explotación de la Quinta Nápoles y el trato entre las partes se cerró por G 7.000.000 por tres años, establecido en contrato, expresó Ayala.
Con relación a la inversión realizada hasta el momento, Ayala detalló que a la fecha ya gastó G 120.000.000 para la red eléctrica, reparación de 10 baños y el pago a personal de limpieza, unas 13 personas. Cada limpiador cobra en G 120.000 por día.
Según Ayala, el promedio de visitas ronda las 2.500 personas por fin de semana, el costo de acceso es de G 30.000 al dìa por persona, y 50.000 por persona para el área de camping. Aclaró que los visitantes no tienen acceso a la mansión.
Teniendo en cuenta los atractivos del sitio y la cantidad de visitas, Ayala confía en que recuperará su inversión y hasta generar ganancias a través del movimiento turístico en esta zona del Alto Paraná.
La ministra Karina Gómez aseguró en su momento que no podía revelar a quien se le concedió la explotación de la quinta en cuestión, amparada en una ley, sin embargo la Secretaría Anticorrupción dictaminó que la institución está obligada a dar detalles de los contratos, bajo el principio de transparencia en la administración pública.
La propiedad, ubicada en la costa del lago Yguazú, en la comunidad de Tacuaró, distrito de Juan E. O’Leary, pertenece al procesado por narcotráfico Reinaldo “Cucho” Cabaña, pero fue incautada en setiembre del año pasado cuando fiscales y agentes de la Secretaría Nacional Antidrogas (Senad) allanaron dicha quinta.