El cardenal Orani João Tempesta, arzobispo de Río de Janeiro y el oficial del dicasterio para la Doctrina de la Fe, monseñor Jordi Bertomeu Farnós, iniciaron hoy una “visita apostólica” de dos días a Paraguay para interiorizarse del caso de supuesto acoso sexual a una alumna de la Universidad Católica, denunciado en el año 2019. Se trata de la denuncia formulada por la estudiante Belén Whittingslow contra el docente de la UCA Cristian Kriskovich.
Los delegados enviados del papa Francisco remitirán un informe a la Santa Sede una vez concluida la breve visita y sin inmiscuirse en la investigación civil y penal abierta en el ámbito judicial. “Ellos ya están en nuestro país, van a ser dos días nada más que pueden estar en esta oportunidad. No sabemos si van a requerir de otra visita, suponemos que ellos indicarán”, comentó monseñor Javier Pistilli Escorzara, gran canciller de la Universidad Católica a la 680 AM.
Pidió a la feligresía acompañar “con mucha discreción y con mucha oración” la visita, de modo a que los religiosos puedan realizar el servicio con tranquilidad. Aclaró que no habrá una declaración oficial al respecto, sino que las conclusiones serán remitidas directamente al Vaticano. “Entiendo que de acuerdo a las orientaciones que han recibido que prefieren en este momento hacerlo con más discreción”, remarcó.
El prelado calificó de positiva la presencia de ambos delegados al alegar que permitirá “tener una visión externa, un complemento que pueda ayudar a encontrar caminos de solución y pacificación”.
“Creemos que también va a sumar a lo que la Universidad misma está haciendo. En este caso, en esta auditoría de todo el proceso realizado. Y esperamos que cuando ellos puedan compartir a través del dicasterio ayuden a la universidad también”, dijo.
Monseñor Pistilli reiteró que se trata de una misión “estrictamente eclesial”, que implica un manejo interno exclusivo dentro de la Iglesia. “Se refiere a proceder en el ámbito eclesiástico de acuerdo al derecho canónico de la Iglesia. Y eso significa también no interferir en los procesos civiles o penales de la Justicia. Es decir, no es propiamente una investigación porque con respecto a los casos las investigaciones civiles y penales que se han hecho corresponden a la Justicia local”, explicó. Dijo que los propios delegados han expresado que vienen a escuchar y de esa manera a interiorizarse de “la situación en forma personal para poder de esa manera orientar mejor”.
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