El buen estado de conservación del empaque de Bounty es una muestra de lo mucho que puede permanecer el plástico en el medio ambiente.
El pasado 26 de abril, Julian Priest, daba un paseo por una playa de la localidad inglesa de Wirral (Reino Unido) cuando descubrió un envoltorio prácticamente intacto de la popular marca de chocolates Bounty fechado en la década de 1980, informan medios locales.
El curioso hallazgo tuvo lugar en la paya de Hoylake cuando el hombre, que acostumbra a retirar basura mientras pasea, vio el papel cerca de la costa. “Sospecho que había estado enterrado en la arena durante años“, comenta Priest, ya que, de lo contrario —argumenta—, los rayos UV del sol o la acción de las olas habrían borrado la impresión del plástico.
En la fotografía del envoltorio hecha por Julian se aprecia claramente el logotipo de la marca Bounty con todos sus colores. La etiqueta también indica su fecha de caducidad para el año 1988 y el precio de 22 peniques (unos 30 centavos de dólar al cambio actual).
El hombre comparó el viejo envoltorio con uno actual y concluyó que algunos de los ingredientes de la barra de chocolate habían cambiado ligeramente, si bien el peso de 57 gramos se mantenía casi igual.
Más allá de la carga nostálgica del descubrimiento, Julian asegura que su aparición es la prueba de lo mucho que puede permanecer el plástico en el medio ambiente. Algunos tipos de envoltorios pueden tardar decenas o incluso cientos de años en degradarse por completo.
Finalmente, Julian reflexiona sobre la gran cantidad de basura de otras personas que suele recoger, globos en su mayoría. “De modo que ese globo de cumpleaños se convierte en parte del los microplásticos de nuestros océanos y de la arena de nuestra playa”, se lamenta.