El abogado y máster en Regulación Financiera, además de dictar cursos internacionales y conferencias, Juan Gustale, asumió como miembro del directorio del Banco Nacional de Fomento (BNF) en junio pasado. Con una amplia trayectoria y tan corta edad, el técnico resalta algunas bondades y los desafíos del sistema financiero paraguayo y de la estatal. Resalta que el sector tiene varios retos, pero que el principal es el de mantener la imagen sólida, además de reconocer el rol importante en el logro de la macroeconomía del país.
También menciona el posicionamiento del BNF y los logros principales, como su renovada Carta Orgánica, la cual le permitirá convertirse en un actor protagónico del sistema financiero, con la posibilidad de otorgar préstamos al sector público, la eventual expansión de sus líneas de productos y servicios, entre otros.
-¿Cuáles son los nuevos desafíos del sistema financiero en general?
– El sistema financiero paraguayo tiene numerosos desafíos, pero principalmente, quisiera centrarme en la necesidad de mantener la sólida imagen que proyecta actualmente, con una rentabilidad sostenible en el tiempo; igualmente, es imprescindible mantenerse a la vanguardia en materia de infraestructura, tecnología y capacitación, teniendo en cuenta la globalización del sector financiero y la apertura del Paraguay hacia nuevos mercados.
Sin duda, el sector bancario ha jugado un rol esencial en el afianzamiento de las sólidas bases macroeconómicas de nuestro país, y ha sabido posicionarse a lo largo de los últimos 10 años, incluso con escenarios económicos adversos, tal como el que vienen atravesando nuestros principales socios comerciales en la región. Creo que todos los indicadores han visto una mejoría notable en los últimos años, demostrando así que Paraguay cuenta con un sistema que goza de credibilidad, que es estable, solvente y sostenible.
-¿Cómo está el posicionamiento del BNF en el mercado?
– El Banco Nacional de Fomento se encuentra posicionado sólidamente, con un nuevo directorio y una renovada Carta Orgánica promulgada a finales de mayo, la cual le permitirá convertirse en un actor protagónico del sistema financiero, con la posibilidad de otorgar préstamos al sector público, la eventual expansión de sus líneas de productos y servicios, así como un mejor aprovechamiento de su amplia red de sucursales y Centros de Atención al Cliente, diseminados a lo largo y ancho del país. A julio del 2017, más de 70 en todo el territorio nacional.
Apuntamos a modernizar la estructura del BNF, reconvertir la imagen de “nuestro banco”, de manera a que la población pueda realmente confiar plenamente en la banca estatal y que la institución sea capaz de brindar un servicio de calidad, acorde con las altas exigencias del mercado.
-¿Cuál es el rol de la entidad para el desarrollo económico?
– La nueva carta orgánica del BNF establece que la institución tiene como objetivo promover el desarrollo económico y social. En ese sentido, la Ley 5.800/17 se convierte en un punto de inflexión para reformular el concepto de banca de desarrollo en el Paraguay, ya que dota al banco de mayores herramientas para expandir su margen de maniobra y ejercer un rol más protagónico en el desarrollo de la agricultura, la ganadería, la silvicultura, la industria y el comercio, actuando como catalizador de los diversos sectores productivos, apuntalando la crucial importancia que los mismos revisten para la consolidación de nuestra economía.
El Banco Nacional de Fomento es un agente importante en la promoción de la inclusión financiera en nuestro país, y se encuentra en condiciones de atraer a una mayor cantidad de gente hacia el sector formal, lo que sin duda puede ayudar a acortar la brecha de inequidad social, lo cual debe hacerse en un proceso que lleva su tiempo, y en el marco del cual la Estrategia Nacional de Inclusión Financiera es un componente vital.
-¿Cuáles son los desafíos del banco?
– La entidad se encarga hoy de cubrir un amplio espectro de pagos a asalariados y jubilados, además de los ya mencionados subsidios de programas sociales; se debe trabajar con la mayor eficiencia y eficacia posible para que la cantidad de gente que pasará a ser cliente del BNF en los próximos meses pueda contar con un servicio de calidad.
Un considerable desafío a corto plazo será el de absorber un enorme caudal de clientes que pasarán a cobrar a través del Banco Nacional de Fomento, al tiempo de completar satisfactoriamente el proceso gradual de migración de los fondos públicos desde la banca privada hacia el BNF.
-¿Tienen algún proyecto diseñado para este año o el 2018?
– En primer término nos encontramos abocados a rediseñar la estructura organizacional del banco, de manera a dotar al mismo de un esquema que contemple las mejores prácticas de gobierno corporativo, de adecuada administración de riesgos, colocación de fondos y optimización de recursos para hacer frente a las exigencias propias del mercado.
Existen numerosos proyectos sumamente ambiciosos a corto, mediano y largo plazos. En líneas generales, quisiéramos potenciar aún más la imagen de la banca pública, a través de la implementación de instrumentos financieros innovadores, respaldándonos en las tecnologías emergentes y en el capital humano con el que cuenta la institución, de manera a cumplir con las metas de políticas públicas que nos compete alcanzar.
Juan Manuel Gustale Cardoni
Cargo: Miembro del Directorio del BNF
Edad: 32 años
Estudios: Derecho (UNA), máster en Regulación Financiera (London School of Economics, Reino Unido) y máster en Administración Pública (Harvard University, EEUU).
Realizó cursos de posgrado en la Universidad Internacional de Florida (EEUU) y en la Universidad de Oxford (Reino Unido), así como pasantías en numerosos bancos centrales.
Ingresó al Banco Central del Paraguay por concurso en el 2009, donde llegó a ocupar los cargos de jefe de gabinete del Directorio, director de Riesgo de Lavado de Dinero y director jurídico de la Superintendencia de Bancos.
LA NACION