El economista Gustavo Rojas, del Centro de Análisis y Difusión de la Economía Paraguaya (Cadep), planteó que Paraguay “debería profundizar un diálogo político con China”, país con el que no mantiene relaciones diplomáticas, sin alejarse de la colaboración bilateral con Taiwán, para no desaprovechar las oportunidades comerciales que ofrece el gigante asiático, informó la agencia Efe.
En una conferencia sobre las Perspectivas comerciales con China, Rojas explicó que Paraguay debe buscar un mayor equilibrio en su relación comercial con China, con el que tiene amplio déficit comercial. La causa de ese desequilibrio, según el economista, es la falta de relaciones diplomáticas entre ambos países, debido a las que mantienen Taiwán y Paraguay, uno de los pocos aliados de la isla en la región.
Rojas señaló que ello no ha ayudado a construir puentes comerciales relevantes, ya que Taiwán supone un 0,46% del total de las exportaciones paraguayas y un 0,28% de las importaciones, frente al 31,1% de productos que compra a China, a la que solo vende un 0,29%.
Sostuvo que Paraguay debe “emprender una nueva política de atracción de inversiones taiwanesas”, como con la creación de un fondo bilateral para financiar proyectos estratégicos mediante créditos que fomenten el comercio, la mejora de las infraestructuras y la cooperación al desarrollo.
Añadió que Paraguay debería “profundizar en un diálogo político con China” en el marco de la Comunidad de Estados Latinoamericanos y Caribeños (Celac) y el Mercosur, con vistas a un futuro acuerdo comercial entre el bloque y el gigante asiático.
Según Rojas, ese acuerdo podría “aumentar la atracción de las inversiones de ese país hacia Paraguay”, especialmente en los sectores industrial y energético, lo que lo beneficiaría transformándolo en un proveedor más importante de bienes dentro del Mercosur.
Sugirió además que se debería “explorar a Hong Kong como puerta de entrada a China”, al ser un territorio aduanero distinto, aprovechando que las inversiones provenientes de esa área alcanzaron los 92 millones de dólares entre 2010 y 2016, mientras que las chinas apenas llegaron a 12 millones, según datos del BCP.
A nivel de la región, Rojas apostó por “fortalecer la integración regional” entre los países de Latinoamérica para coordinar los diálogos comerciales con China y hacer frente a la fuerte presencia de productos chinos en los mercados regionales que amenazan la producción interna.
El economista aludió al aumento de la presencia China en las economías del Mercosur, hasta tal punto que ya “ocupa el primer o segundo puesto” entre los socios comerciales del bloque. UH