Desde el Banco Central del Paraguay (BCP) aseguraban que la economía, en esta segunda parte del año, retomaría su recuperación frente a los primeros 6 meses tras ser afectada principalmente por una dura sequía. Los datos a corto plazo confirman lo esperado tras un repunte en la actividad económica, en las ventas generales y en la mejora de la confianza del consumidor, por lo que aseguran que la economía está tomando fuerza y volviendo incluso a su estado prepandemia.
Así resaltó José Brítez, CEO del banco Itaú Paraguay, a La Nación/Nación Media, recalcando que desde la entidad ven una proyección de crecimiento económico para el 2023 muy positiva, siempre y cuando el clima siga acompañando de la forma que se está dando. “El clima debe permitir que la cultura de la soja siga bien y que se den los cuidados culturales, con el agua necesaria, que se dé una cosecha normal”, agregó.
En ese sentido, el ejecutivo mencionó incluso que no hace falta que se dé una cosecha muy excelente, ya que bastaría con que se dé de forma normal. “Yo creo que si se dan esos escenarios, la economía seguirá con su fuerza. Lógicamente necesitamos que se generen más empleos y aquellos empleos que se precarizaron vuelvan a ser empleos normales, bien remunerados y con seguridad social que se necesiten”, añadió.
Brítez aclaró que también se debe, para lograr el acompañamiento, seguir combatiendo la informalidad para que a partir de ahí se tenga un crecimiento sostenido de la economía.
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Proyecciones
Si bien la actividad desestacionalizada repuntó con fuerza en agosto, según los indicadores adelantados, el informe de Itaú Escenario Macro de Paraguay sigue proyectando una caída del 0,5% del producto interno bruto (PIB).
Asimismo, revisó su pronóstico de inflación de fin de año a 8,8% (anteriormente a 9,1%), reflejando un mayor efecto al esperado en el índice de precios del consumidor (IPC) por un descuento en las tarifas eléctricas y una reducción esperada en los precios de los combustibles en octubre.
“Aumentamos nuestra proyección de crecimiento del PIB para este año a -0,5%, desde -1,0% en nuestro escenario anterior. Para el 2023, mantenemos nuestro pronóstico de crecimiento del PIB de 5,0%, reflejando un efecto base luego de una severa sequía este año y a pesar de un peor panorama global”, indica el informe.
Agrega que los datos del tercer trimestre del 2022 (3T22) son mucho mejores, ya que la actividad repuntó con fuerza en agosto, según el proxy mensual del PIB, Imaep, que publica el Banco Central. El indicador se expandió a un sólido 5,5% mensual desestacionalizado (después de caer un 0,2% en julio), llevando la tasa de crecimiento anualizada trimestre a trimestre a 13,2% (desde 0,9% en el 2T22). LN
