La base del Grupo Especial de Operaciones (GEO) de la Policía Nacional fue desarticulada en Ypejhú. La llamativa decisión preocupa a los pobladores, porque la zona fronteriza queda más desprotegida.
El intendente local, Emigdio Morel (ANR), ya envió una nota al actual director de Policía de Canindeyú, comisario general Vidal Achucarro, pidiendo nuevamente la habilitación de la base de GEO. Sin embargo, el alto jefe policial del departamento le informó que la decisión está a cargo del comandante de la Policía Nacional, Bartolomé Gustavo Báez López, expresó el jefe comunal.
Varios pobladores que prefirieron el anonimato por temor a represalias indicaron que no están de acuerdo con la medida adoptada por la Policía Nacional; incluso mencionaron que el pedido de desarticular la oficina provino de mafiosos de la zona, quienes se ven molestados por la presencia de los policías en Ypejhú.
Los seis uniformados que prestaban servicios en el lugar estaban alojados en una modesta vivienda. El local fue construido luego del asesinato del periodista Pablo Medina, el 16 de octubre de 2014. “Nosotros nos quedamos prácticamente a merced de los narcotraficantes y traficantes de ganado, que actualmente están en auge y cuentan con fuerte respaldo de un sector político”, expresaron.
Consultamos días atrás con el director de la Policía Nacional en Canindeyú, comisario Achucarro, sobre el tema. Este había dicho que había posibilidad, pero reiteró que está a cargo de los superiores la presencia del GEO en Ypejhú, considerada zona roja por la presencia de narcos y sicarios. Según los lugareños, el ingreso de ganado de contrabando también es incesante. ABC