Sabina Dávalos no solo fotografío a su hija muerta de 7 años sino también filmó el momento en que la ahorcaba. El fiscal del caso, Cristian Royg, indicó que la criatura sufrió mucho días antes de morir. La filicida confesa fue imputada por homicidio doloso y hoy será remitida a la cárcel de Coronel Oviedo (Caaguazú).
“Días antes anunció que iba a cometer el hecho, pidió que vengan a buscar a la menor porque no la quería más, que le recordaba mucho al padre. La pobre criatura estaba sufriendo los tormentos días antes y desembocó en una desgracia”, manifestó el agente del Ministerio Público.
Cristian Royg refirió que la madre no solo envío fotografías de la niña muerta (al padre y abuela), primero colgada y luego en la cama, sino también filmó el hecho. El fiscal no se explica el actuar de la mujer contra la menor de 7 años, pues en el teléfono celular de la filicida hallaron una buena cantidad de imágenes que demostraban un fuerte vínculo afectivo.
“Era la única hija de la pareja, en el celular de la madre encontramos varias fotos, incluso tenía como protector de pantalla una foto con su hija. Nos sorprende a todos la actitud de la madre, que llegó a cometer este crimen”, declaró Royg en contacto con la 650 AM.
Sabina Dávalos confesó ser la responsable del hecho y fue imputada por homicidio doloso. Esta mañana será trasladada a la penitenciaría de Coronel Oviedo, en el departamento de Caaguazú, donde guardará reclusión mientras dure el proceso de investigación.
El triste suceso ocurrió ayer de madrugada, en el interior de una vivienda ubicada en el barrio Cerro Corá de Curuguaty (Canindeyú). La víctima fue identificada como Ruth Noema Acosta Dávalos, de apenas 7 años. La desalmada mujer usó cables del televisor para colgar a la niña del techo y luego intentar quitarse la vida, consumiendo pastillas.
Dávalos intentó suicidarse en la Comisaría 5ª de Curuguaty. “Varias veces ya intentó hacerse daño, pero ya quitamos todas las cosas y no hay nada con lo que se pueda matar”, comentó suboficial primero, Mabel Vera.HOY