El pa’i Billy dedicó 30 años a Dios, era muy conocido y querido.
Correcto, estricto, entusiasta y un referente de los jóvenes. Así describían al sacerdote Eusebio Lezcano, tras conocerse su inesperada partida. Un trágico accidente segó su vida ayer a los 65 años.
El cura, más conocido como pa’i Billy, viajó desde Concepción a la capital del país para realizar unos trámites, pero esta fugaz visita era la última.
Camino a la capital del primer departamento, donde reside desde enero, el sacerdote se accidentó a bordo de su camioneta. El percance ocurrió a la altura del kilómetro 225 sobre la Ruta Transchaco.
Según el subcomisario Fernando Carrizo, de la Comisaría Montelindo, de Pozo Colorado, Lezcano perdió el control del vehículo, cruzó la ruta y volcó aparatosamente. Si bien al principio se creyó que el mal estado de la ruta habría causado la tragedia, se descartó que había baches.
Un testigo vio cuando el salesiano zigzagueó y frenó bruscamente. “El rodado fue a parar a un charco de agua, quedó con las ruedas para arriba y el conductor quedó atrapado, cuando le auxiliaron ya estaba sin vida”, dijo.
Los investigadores presumen que el sacerdote habría sufrido un infarto que lo desequilibró y reaccionó con una larga frenada. El forense Ramón Marecos determinó que el pa’i se ahogó en aquella cuneta desbordada.
El sexto hijo
La triste noticia pesó muchísimo a sus allegados y parientes.
Elioth Lezcano, su hermano menor, manifestó a EXTRA que Eusebio era un hombre muy enérgico, fue militar y recorrió varios países tras decidir consagrar su vida a Dios.
“Éramos siete hermanos, él era el cuarto hijo, ahora quedamos solo 4”, lamentó.
Mencionó que si bien la muerte del padrecito les dejó un vacío, les reconforta saber que cumplió su misión a cabalidad en la Tierra.
“Está con mamá”
“El señor nos trae y él nos lleva, ahora él se fue a reunirse con nuestra mamá en el Día de la Madre”, expresó. Toda la comunidad salesiana lamentó la triste pérdida.
Sus restos serán velados durante todo el día en la Casa Betania, en la parroquia Domingo Savio de Fernando de la Mora.
Gran referente de los salesianos
El padre Eusebio Lezcano fue sacerdote de la comunidad salesiana. Conocido como Pa’i Billy, fue abogado y animador de la escuela de fútbol Arsenio Erico. También ocupó el cargo de director del colegio Monseñor Lasagna hasta el año pasado. Lo recuerdan como un cura muy disciplinado y estricto. En enero de este año fue designado a Concepción. Allí se desempeñaba como director del colegio San José y de otras dos casas salesianas: Don Bosco y San Luis. Era ecónomo y fue animador de jóvenes. Se consagró como cura el 28 de agosto de 1988, se entregó a Dios por 30 años. EXTRA