La crisis económica de Ciudad del Este comenzó a multiplicar el malestar y las quejas de la gente.
La merma en las ventas impacta a los comerciantes, taxistas, y demás trabajadores del microcentro, que hoy apenas ganan lo suficiente para comer. La extendida situación se ve reflejada en toda la ciudad, donde hoy miles de familias que dependen directa e indirectamente del comercio no están derivando sustento para sus hogares, debiendo recurrir a otras actividades.
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Ciudad del Este, frontera con Brasil, hoy sufre una de las peores crisis económicas, ocasionando problemas de desempleo, ante el cierre masivo de establecimientos comerciales. Dicha situación ha provocado fenómenos de subsistencia, ante la merma de la actividad comercial.
Javier Miranda, presidente de la Asociación de Trabajadores y Comerciantes del microcentro, comentó que muchos de los mesiteros se vieron obligados a buscar otras actividades para generar ingresos como una estrategia para sobrevivir a la crisis.
“Estamos sobreviviendo vendiendo lo poco que tenemos, los que ya vendieron todo ya abandonaron sus puestos. Ahora es cuestión de sobrevivencia. Algunos están trabajando como ayudantes de albañil y muchos recurren al contrabando para vender en sus barrios mercaderías de todo tipo. Se busca alternativa de sobrevivencia”, detalló.
Comentó igualmente, que la situación es bastante triste, ya que la merma en los ingresos ha aumentado el nivel de endeudamiento de los comerciantes que hoy ni siquiera están logrando pagar el costo del alquiler de los puestos o tiendas que ocupan, debiendo abandonar la actividad comercial.
“Este fenómeno social es producto de la falta de atención del gobierno y no tengo dudas que con el tiempo podría registrarse un aumento de la violencia en la región, como el narcotráfico, bandas criminales, contrabando y otros”, reiteró.
TAXISTAS NO TIENEN TRABAJO
Por su parte, Valerio Martínez, representante de los taxistas, dijo que en las paradas existe mucha penuria, ya que los trabajadores del volante no están pudiendo cubrir sus gastos. “Hay mucha miseria, incluso hay choferes que tienen que rendir un porcentaje al propietario del rodado y muchas veces solo se hace un viaje por día, también hay compañeros que incluso no llegan a salir todo el día”, precisó.
Acotó que los trabajos de revitalización del puente de la Amistad son uno de los factores que afectó el movimiento de los taxistas, ya que la gente prefiere pasar caminado la frontera ante la lenta circulación del tránsito. “Para nosotros ya no hay sábado ni lunes, es muy triste porque muchos no pueden pagar ni la cuota social en su parada”, manifestó.
El sector comercial local dio su desplome a consecuencia de la devaluación del real brasileño y el peso argentino, además de la suba del dólar americano, generando una gran reducción en el flujo de compradores extranjeros. – See more at: http://www.vanguardia.com.py\
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