La ola de ejecuciones que actualmente azota con fuerza la terraza del país es consecuencia de una Policía corrupta en la capital departamental. Así afirmó tajante el diputado nacional Roberto Acevedo (PLRA), al tiempo de sostener que la alta cúpula policial que se encuentra en la región mantiene vínculos con la poderosa mafia de frontera.
“Ellos se venden por poca plata. Tienen que recaudar para repartir a la alta cúpula policial que le envían a la frontera. Existe un valor que sí o sí deben poner mensualmente, caso contrario son cambiados. Y la consecuencia es esta. Grupos delictivos hacen lo que quieren en la ciudad ante la inacción de los uniformados, que hacen caso omiso a los hechos delictivos para no perjudicar a sus patrones”, sostuvo tajante el parlamentario.
Según Acevedo, en esta parte del país existe un rentable vínculo entre delincuentes con policías, hecho que según sostuvo es de público conocimiento de la sociedad fronteriza. “Los controles que hace la Policía tienen como único mensaje demostrar a la ciudadanía que supuestamente están trabajando. Pero lo anecdótico es que mientras hacen controles, un grupo de sicarios operan impunemente en la ciudad matando a mansalva, mientras que privilegiados delincuentes con fusiles de guerra se pasean con sus lujosas en camionetas, sin ser molestados por esos agentes del orden”, acotó.
Acusó al Departamento de Investigaciones de estar ligado, con más fuerza, a bandas criminales que operan impunemente en la ciudad. “Ellos (Investigaciones) son los que más están ligados al crimen organizado”, afirmó al tiempo de calificar al director de Policía del Amambay como una figura “decorativa”.
“Investigaciones, que ni siquiera depende de la Dirección de Policía es la que tiene a su cargo las averiguaciones de los hechos punibles pero, sin embargo, se pasan coimeando por la ciudad”, señaló.
10 ASESINATOS
En lo que va del mes, 10 personas fueron ejecutadas a tiros en la ciudad de Pedro Juan Caballero. De esa elevada cantidad de muertes, la Policía solo logró resolver una, con la captura de los presuntos autores del sangriento suceso, dos jóvenes de tan solo 17 años de edad. Los demás hechos de asesinatos siguen en la nebulosa, puesto que hasta el momento nada se sabe de los presuntos autores de los crímenes.
“Las investigaciones continúan”, es la respuesta casi mecánica que el alto mando policial proporciona a los medios de prensa cuando son requeridos sobre las pesquisas en torno a las ejecuciones. “Mientras tengamos a esta Policía corrupta, que fácilmente se vende a los delincuentes, nada cambiará. Es nuestra triste realidad”, dijo tajante Acevedo.
