Una funcionaria de enfermería de la Unidad de Salud Familiar (USF) de Cocuera, en el distrito de Choré, San Pedro, acabó renunciando a su puesto cansada de luchar por el cobro de su salario, que nunca percibió desde que fue contratada en agosto del año pasado.
Ramona Noemí Ayala Abrahan renunció esta semana al cargo que venía desempeñando como enfermera de la USF de Cocuera hace seis meses, debido a que no pudo cobrar ni una sola vez su salario. Sin embargo, trabajaba todos los días y cumplía con su horario, según explicó.
El año pasado ganó en un concurso del Ministerio de Salud el puesto de agente comunitario para el distrito de Choré, San Pedro, por lo que fue contratada el 7 de agosto de 2019.
La funcionaria explicó que ante la falta de pago recurrió a todas las instancias posibles a nivel departamental, pero luego de varios meses se vio superada por la burocracia y decidió dejar el trabajo que obtuvo por méritos. Renunció desesperada, agobiada por las cuentas, puesto que gastaba G. 20.000 diarios para trasladarse al trabajo, que quedaba a 20 kilómetros de su casa.
Desde un principio le habían indicado que no podía percibir su remuneración debido a que figuraba con un rubro docente en el Servicio Nacional de Promoción Profesional (SNPP) de Choré y que esto era “un problema de la central”, informó el corresponsal de Última Hora Carlos Aquino.
Así que ella decidió renunciar al rubro para cumplir con el requerimiento, ya que se trataban solamente de tres horas cátedras de un curso, a pesar de que la docencia en el país es compatible con los asalariados del Estado. De todos modos, siguió sin cobrar.
La directora de la Atención Primaria de la Salud (APS) de la cartera sanitaria, Maida Barrios, dijo a Última Hora el viernes de la semana pasada que se interiorizaría del estado administrativo de Ayala, pero no facilitó detalles. El lunes manifestó que desde el área de Recursos Humanos entablaron comunicación con la afectada.
Ramona Ayala contó que le llamaron para pedirle “otro documento” más. “Era un lío. (…) Para mí ya se hizo larga esta situación. Me dijeron que tengo que renunciar al vínculo del SNPP y les dije entonces: ¡Che kuerái! (estoy cansada) Porque son seis meses que estoy viniendo sin poder cobrar un guaraní”, expresó.
Harta del mismo argumento de Salud Pública fue que presentó su renuncia el martes en la APS de San Pedro. “Llevé porque no encontré salida. Supuestamente, tenemos que cobrar por los meses trabajados con la nota que llevé. Pero cobre o no, ya no aguanto más, era una presión muy fuerte tanto económica como sicológica”, manifestó.
Había dicho en otro momento que en reiteradas oportunidades informó de su caso a la Dirección General de Atención Primaria de la Salud, pero que no recibía solución alguna a su inconveniente.
“Necesito cobrar, tengo hijos que mantener, soy madre soltera y ya no sé a dónde recurrir. Estoy desesperada, necesito que me paguen porque cumplo con mi trabajo. (…) No tengo otra opción porque se pasan la pelota y estamos tres compañeros a nivel nacional en esta situación”, expresó.
La Unidad de Salud Familiar de Cocuera se encuentra a unos 15 kilómetros del casco urbano de Choré, una zona altamente poblada con varios casos registrados de dengue.