Washington, Estados Unidos. AFP.
Cobrar el sueldo, pagar cuentas, enviar dinero: los celulares pueden potenciar la inclusión financiera, crucial para mejorar la vida de la gente y combatir la pobreza, afirmó, recientemente, el Banco Mundial. La tecnología digital permite hacer operaciones que actualmente se realizan en efectivo, y así incorporar a más personas al sistema financiero, concluyó un informe del organismo, cofinanciado por la Fundación Bill y Melinda Gates y apoyado por la reina Máxima de Holanda.
El último Global Findex, que desde el 2011 compila entrevistas a 150.000 adultos en 144 países, por primera vez recabó información sobre el acceso a teléfonos móviles, revelando “un aumento significativo” de su uso para realizar operaciones financieras. La proporción de titulares de cuentas bancarias que entre el 2014 y el 2017 enviaban o recibían pagos a través de medios digitales subió de 67% a 76% en todo el mundo, y de 57% a 70% en los países en desarrollo, indicó.
El reporte mostró además que dos tercios de los 1.700 millones de adultos no bancarizados poseen un celular y 480 millones tienen acceso a internet.
“Los nuevos datos sobre la propiedad de teléfonos celulares y el acceso a internet muestran que existen oportunidades sin precedente de usar la tecnología para lograr la inclusión financiera universal”, dijo el presidente del BM, Jim Yong Kim. A través de cuentas móviles se puede generar ahorro, conseguir préstamos y planificar gastos, explicó. “Los servicios de dinero móvil –que permiten guardar y transferir fondos a través de un teléfono celular– pueden contribuir a mejorar el potencial de generación de ingresos de las personas y, así, a reducir la pobreza”, indicó el informe.
DIGITALIZANDO EL PAGO DE LOS SUELDOS
La reina Máxima, asesora especial de la ONU para la inclusión financiera, celebró las “fuertes oportunidades para el progreso”, e instó a los gobiernos y a las empresas a sumarse a los esfuerzos de inclusión digitalizando el pago de sueldos. Según el BM, los Estados podrían reducir el número de adultos no bancarizados hasta en 100 millones a nivel global, de los cuales 95 millones están en economías en desarrollo.
En el sector privado hay más aún para hacer: unos 230 millones de adultos sin cuentas bancarias cobran su salario en efectivo, 78% de los cuales tienen celular. En el ámbito rural, aproximadamente 235 millones de adultos no bancarizados reciben pagos en efectivo. La economista del BM Leora Klapper enfatizó que la bancarización puede beneficiar en especial a las mujeres, que tienen más probabilidades de ahorrar e invertir en salud y educación que los hombres.