Al finalizar la feria judicial y reiniciarse las actividades en el mes de febrero en los tribunales, los casos de varios políticos que por años chicanearon sus procesos entran en la etapa final de juzgamiento. En algunas causas emblemáticas, como la de los audios filtrados del Jurado de Enjuiciamiento de Magistrados (JEM), que ya fue elevada a juicio oral, solo se espera que se fije la fecha para su realización. Podrían ocurrir condenas históricas.27 DE ENERO DE 2020 – 01:00
Este será un año marcado por varios juicios orales de senadores, diputados y exparlamentarios que podrían terminar condenados.
Uno de estos casos es el que involucra al diputado por el departamento de Paraguarí Tomás Rivas (ANR, cartista), quien debe someterse a la audiencia preliminar en la que se decidirá si su proceso va a juicio oral.
Rivas está acusado de haber hecho nombrar a tres de sus caseros como funcionarios en la Cámara de Diputados. Cobraban sueldos del Estado pese que nunca asistieron a trabajar en la Cámara; sí lo hacían en propiedades o negocios pertenecientes al diputado.
Para los caseros, el 4 de febrero se inicia el juicio oral. El diputado Rivas se pasó chicaneando el proceso por más de un año y por esa razón recién ahora irá a audiencia preliminar, pero es casi un hecho que se elevará a juicio oral tal como sucedió con sus empleados particulares.
Otros exsenadores que ya irán a juicio oral son: Óscar González Daher (ANR, cartista) y Jorge Oviedo Matto (Unace), por el caso de los audios filtrados del JEM. Ambos estarán sentados en el banquillo de los acusados, solo falta que se fije la fecha para este juicio.
También el condenado exsenador Víctor Bogado (ANR, cartista) tiene pendiente la fijación de la fecha en la que debe ir a juicio oral en el caso de la demanda que le inició la diputada liberal Celeste Amarilla, por haber denigrado la memoria del esposo de la parlamentaria, Franklin Boccia. Al no llegarse a un acuerdo entre las partes el caso fue elevado a juicio y solo se espera la fecha de su realización.
El diputado Carlos Portillo (PLRA, efrainista) también está ya con pedido de elevación a juicio oral, pero por una chicana presentada por el legislador el caso está cajoneado en la Cámara de Apelación de Ciudad del Este desde hace más de un año.
El único diputado preso, Ulises Quintana (ANR, Añetete), también este año debe enfrentar audiencia preliminar. Está acusado por tener nexos con una banda de narcotraficantes.
El diputado Miguel Cuevas (ANR, Añetete) tiene un pedido de prisión pendiente que debe ser resuelto por el juez Gustavo Amarilla, el también diputado Esteban Samaniego (ANR, Añetete), por su parte, está siendo blindado por sus pares, ya que no tratan un pedido de desafuero que fue solicitado por el juez Elio Rubén Ovelar, quien no lo puede someter al juicio por calumnia y difamación debido a que tiene fueros. Dos veces el magistrado ya pidió a la Cámara de Diputados el desafuero. ABC