Desde la Confederación de la Clase Trabajadora consideran necesario un reacomodo del 10% en el salario mínimo, pero a la vez preocupa que esto generalmente conlleve a un aumento de los productos de consumo masivo, por lo que plantearán algunas medidas y una de ellas es un sistema de “control de precios”. Sin embargo, desde el Banco Central del Paraguay (BCP) aclararon que el sistema no es factible, ya que podría causar daños a la economía.
Miguel Mora, economista jefe del BCP, indicó que el sistema no es bueno, ya que si bien puede aparentar un beneficio en el corto plazo, generalmente los controles de precios en la mayor parte de los países que lo aplicaron no resultaron. “Ahí está el caso de Argentina y Venezuela. Esto hace que en la medida que permanezcan niveles de precios por debajo del equilibrio, inicialmente reducen las inversiones en el sector, por lo que hacia adelante hay escasez de bienes o, en el caso de un servicio, tiende a deteriorarse justamente por la falta de inversión”, comentó.
Agregó que se puede ver efectos, como los que se vieron en Argentina, donde al establecer precios para los productos cárnicos, generalmente se observó una falta de inversión. “Se dejó de producir, se redujo la oferta, y en el mercado negro, que tiende a formarse en este escenario, el precio era mucho mayor incluso antes de la implementación de la medida. Generalmente no dan buenos resultados”, afirmó.
Julio López, presidente de la Confederación de la Clase Trabajadora, remarcó que la preocupación es que un reajuste salarial siempre produce una escalada de precios en artículos de primera necesidad que afecta a todos, por lo que tienen previsto plantear otras medidas como el “control de precios”. En cuanto a cuál es la perspectiva que tienen, López mencionó que hay información de la decisión de la directora de Trabajo de convocar al Consejo de Salarios Mínimos, lo cual es un paso importante.
Problemas a la economía
Por otro lado, tras el análisis y la conformación de una mesa de trabajo que plantea ajustar lo antes posible el salario mínimo vigente en Paraguay, y no recién en julio próximo como establece la ley, desde el sector económico ya se estudia su impacto y adelantan que traerá problemas a la economía que no crece.
Sobre el punto, el economista de Basanomics y exministro de Hacienda Santiago Peña explicó que el problema de la inflación se reflejará en los costos de las empresas a través del salario mínimo. Este año se fijará el sueldo base en al menos 10%, cuando Paraguay no vio esto desde el 2016, ya que desde ese año se cambió la ley de ajuste del SM.
“Anteriormente se ajustaba una vez que la inflación llegaba a los 10% y para eso pasaban 3 años. Esta será la primera vez, en más de 6 años, que el ajuste será en ese orden”, especificó. En ese sentido, el economista aclaró que esto acarreará problemas a la economía paraguaya que no crece, donde se debe sumar un nuevo costo dentro de la estructura administrativa de las empresas. LN