Antidrogas rastrean en el departamento de Canindeyú dos avionetas pertenecientes a la red del presunto jefe narco Mario Villalba (37). Las naves, cargadas con drogas, aterrizaron poco antes de la captura del sospechoso y desde ese momento están guardadas.
El presunto jefe narco Mario Villalba, alias Gato, fue capturado en la mañana del jueves 27 de febrero pasado en una operación policial encabezada por el jefe del departamento Antinarcóticos, Crio. Princ. Críspulo Sotelo.
Villalba, quien supuestamente controlaba gran parte de la cocaína que era remesada desde Ciudad de Este al Brasil, operaba desde una granja de seis hectáreas ubicada a orillas del lago Acaray, distante cinco kilómetros de la ciudad de Hernandarias. La propiedad fue adquirida por el sospechoso dos años atrás por US$ 1.000.000, confirmaron los investigadores.
Las actividades del supuesto capo de las drogas fueron detectadas luego de que los investigadores interceptaron varias de sus comunicaciones con proveedores bolivianos y peruanos.
La estructura de Mario Villalba recibía por lo menos tres cargas de cocaína mensualmente. La droga era traslada desde Bolivia en avionetas, que aterrizaban en pistas clandestinas ubicadas en el departamento de Canindeyú. Desde estos puntos acarreaban la “mercancía” por tierra hasta la granja de Hernandarias, donde era procesada y luego enviada al Brasil, según los datos.
Horas antes de la captura del sospechoso, dos naves cargadas con cocaína para una red criminal brasileña aterrizaron en Canindeyú. Pero tras confirmarse el arresto de “Gato” Villalba, los pilotos guardaron las naves y abandonaron la zona por tierra. Ahora los antidrogas buscan el lugar donde estarían ocultas estas dos narcoavionetas cargadas con droga. En tanto que los abogados buscan armar una estrategia para liberar con medidas a Villalba, quien está recluido en la penitenciaría de Ciudad del Este. Supuestamente, están esperando el momento procesal oportuno para la maniobra, indicaron las fuentes.
“Incentivo” a magistrados
Según informaciones filtradas en Alto Paraná, los abogados del presunto jefe narco Mario “Gato” Villalba (37) estarían haciendo todo lo posible para conseguir medidas alternativas a la prisión para su cliente, pese a que este tipo de concesiones no están permitidas en el Código Penal para procesados por narcotráfico.
Supuestamente, hay millonarios ofrecimientos para los magistrados que accedan a firmar la resolución de libertad.
La Policía calcula que la red que manejaba “Gato” desde su granja de Hernandarias movía unos cinco millones de dólares mensuales en “mercancías” para distintas organizaciones criminales del Brasil.ABC