El estudio destaca la importancia de sincronizar el ritmo biológico con los horarios sociales para prevenir enfermedades metabólicas
Las personas que suelen trasnocharse presentan un mayor índice de masa corporal (IMC), cinturas más grandes, mayor cantidad de grasa corporal oculta y casi un 50% más de probabilidades de desarrollar diabetes tipo 2 (DT2) en comparación con quienes se acuestan temprano, según un reciente estudio.
Los resultados serán presentados en la reunión anual de la Asociación Europea para el Estudio de la Diabetes, que se lleva a cabo del 9 al 13 de septiembre en Madrid, España, informa News Medical.
El estudio, realizado por un equipo de científicos neerlandeses, analizó la relación entre el horario de sueño, la diabetes tipo 2 y la distribución de la grasa corporal en más de 5.000 individuos como parte del proyecto Netherlands Epidemiology of Obesity.
Los investigadores encontraron que los participantes con un cronotipo tardío, es decir, aquellos que tienden a acostarse más tarde, tienen un riesgo 46% mayor de padecer diabetes tipo 2 en comparación con los de cronotipo intermedio.
Los hallazgos sugieren que el riesgo aumentado de diabetes en los cronotipos tardíos no puede explicarse únicamente por el estilo de vida. Jeroen van der Velde, del Centro Médico de la Universidad de Leiden y autor principal del estudio, propone que el desajuste entre el ritmo circadiano de los cronotipos tardíos y los horarios laborales y sociales podría ser un factor clave.
“Creemos que otros mecanismos están en juego. Un desajuste circadiano, provocado por la desincronización del reloj biológico con las demandas sociales, puede llevar a alteraciones metabólicas y, eventualmente, a la diabetes tipo 2″, explicó van der Velde.
Este estudio destaca la importancia de sincronizar el ritmo biológico con los horarios sociales para prevenir enfermedades metabólicas y resalta la necesidad de considerar el cronotipo de una persona al abordar riesgos de salud asociados con el sueño.
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