Mantener la limpieza de las playas es una de las prioridades de las autoridades encarnacenas y uno de los puntos más admirados por los visitantes. Ahora, un ruidoso grupo de jóvenes ayudan a lograr el cometido.
Uno de los éxitos que permiten que las playas de la ciudad de Encarnación sean las más buscadas por los turistas en esta época del año tiene que ver con la limpieza, más allá de sus bellezas naturales y su infraestructura.
Celosos por este cuidado, la Municipalidad posee su propia Policía Ambiental, cuyos efectivos recorren las playas de la ciudad en busca de desubicados que arrojan basura en la arena o ingresan con envases de vidrio. Ya el año pasado estos efectivos se vieron en la necesidad de intervenir y multar a aquellas personas que con su comportamiento ensuciaban lo que tanto cuesta mantener limpio.
Novel incursión. Además de la existencia de estas normativas y un cuerpo de policía formado en exclusividad para este tipo de intervenciones, ahora uno de los símbolos de los carnavales encarnacenos se suma a esta campaña de vigilancia.
Se trata de grupos de jóvenes que conforman una batucada, estos al detectar que personas se encuentran ensuciando la playa comienzan a batir sus tambores, y a cercar en el lugar a la persona que arrojó basura al área, al agua o ha ingresado con envases de vidrio, lo cual se encuentra totalmente prohibido.
La percusión de los tambores provoca la reacción del público presente que abuchea para corregir inmediatamente el error o la mala conducta por parte del infractor. “Son iniciativas de parte de la propia ciudadanía local que de alguna manera refleja el celo que se pone en cuidar algo que mucho ha costado poner en vigencia, estamos organizando aún los esquemas, y en la práctica veremos cómo se da la situación, este tipo de gestos existen y son muchos”, explicaba Sergio Godoy, responsable de la administración de la playa San José.
Previa, Los infractores serán previamente advertidos, incluso se les dará bolsitas para recoger sus basuras y depositarlas en los basureros que abundan en las playas de la costanera. Si se resisten, se labrarán actas contra esas personas y podrían ser multadas; pero además van a ser escrachadas con batucadas, activación que creen será mucho más exitosa que cualquier otra medida.
“Un grupo de ciudadanos con una batucada se les va a acercar y van a hacer ruido, a nadie le va a gustar que se le mire por puerco. Creo que esto tendrá mejor resultado que la multa económica”, acotó Godoy.
A tener en cuenta. Quienes visiten las playas de Encarnación también deben tener en cuenta otros importantes puntos, como la exigencia de ropa adecuada para el agua. “No precisamente que sean sí o sí trajes de baño, pero no queremos que se metan al agua con prendas largas, jeans o pantalones”, explicó el encargado de la playa San José, una de las más concurridas de la capital del verano.
En cuanto a las mascotas, está prohibido tenerlas en zona de arena, deberán estar en la explanada y con correa, ya que pueden ser agresivas con otros turistas.
La polución sonora también estará controlada constantemente, pues no se podrá sobrepasar los decibelímetros permitidos en las playas; pero los amantes de la música a alto volumen pueden ir al Paseo de los Teros, habilitado para ese fin.
Ente. Los controles serán realizados por la Policía Ambiental municipal, guardias de seguridad, guardavidas y un monitoreo por cámaras.
Sancionado. Un bañista que se negó a retirar sus botellas de vidrió de la playa fue el primer sancionado desde la habilitación de la temporada, el 1 de diciembre pasado. “Tuvimos que labrarle acta, se le advirtió tres veces y no quiso retirar sus envases de vidrio”, detalló Godoy. UH
