India, azotada por una violenta ola de COVID-19, no tiene suficientes camas de hospital para sus enfermos, necesita oxígeno y medicamentos, señales claras de que su sistema de salud es arcaico y no ha recibido la financiación suficiente. La pandemia provoca más de 2.000 muertos diarios en el segundo país más poblado del mundo, con 1.300 millones de habitantes. La AFP destaca los factores que han conducido a esta crisis.
Alivio al inicio de año
Cuando la pandemia golpeaba a muchos países a principios de 2021, India veía con alivio que el número de contaminaciones diarias era de solamente 9.000 casos y menos de 80 muertos, con lo que se pensó que el país quizá superaba la enfermedad.
Inmunidad colectiva
Estudios serológicos sugirieron que una fuerte proporción de la población presentaba anticuerpos y que India posiblemente había logrado la “inmunidad colectiva”. También sugirieron que la juventud de la población india y la gran exposición a otros agentes patógenos aumentaron su resistencia al virus.
Optimismo prematuro
El pico epidémico alcanzado en septiembre y la disminución de contaminaciones alentaron a los gobiernos central y estatales a autorizar un retorno a una vida casi normal de las actividades. “Creo que una prematura declaración de victoria dio a la población un sentimiento erróneo de autosatisfacción” dice a la AFP Ramanan Laxminarayan, del Center for Disease Dynamics, Economic and Policy.
Aglomeraciones
Decenas de miles de agricultores se manifestaron contra las nuevas leyes agrícolas del gobierno nacionalista hindú. Y los masivos mítines, así como las elecciones regionales, tuvieron su responsabilidad en este rebrote epidémico.
A ello se añadieron las muchedumbres que asistieron a festivales religiosos como Durga Puja o Dussehra y sobre todo el de Kumbh Mela en Haridwar, en el Estado de Uttarakhand (norte), que congregó a 25 millones de peregrinos hindúes desde enero, y que dura hasta fines de abril.
No anticipar
Las autoridades no aprovecharon los momentos de reflujo para reforzar el sistema sanitario indio. Hubiera sido necesario entonces anticipar y “crear reservas de medicamentos antivirales, pero eso no ocurrió” estima Raman Gaikwad, especialista de enfermedades infecciosas en el hospital Sahyadri de Pune. Los expertos habían advertido desde hace tiempo que India, como muchos países pobres, carecía de suficiente oxígeno médico, vital para tratar los casos graves de COVID-19.
La diplomacia de las vacunas
Además, en pleno reflujo del virus en el país, y en un impulso de generosidad y de “diplomacia de las vacunas”, India exportó decenas de millones de dosis AstraZeneca fabricadas en su territorio.
La variante
Muchos atribuyen ahora a la “doble mutación” del virus este rebrote exponencial, con 4 millones de nuevas contaminaciones registradas solamente en el mes de abril en India.
Hospitales desbordados y faltos de oxígeno
Los hospitales de Nueva Delhi, desesperados por la explosión de casos de coronavirus, reclaman más oxígeno medicinal este viernes, mientras que a las afueras de Bombay trece enfermos de COVID-19 murieron en el incendio de una clínica, una tragedia más en la catástrofe sanitaria que vive India.
En las últimas 24 horas, se registraron 330.000 nuevos casos de coronavirus y 2.000 decesos en India. El envejecido sistema sanitario indio lleva muchos años subfinanciado y ahora, frente a esta violenta segunda ola de la pandemia, enfrenta una falta de los medicamentos y del oxígeno que necesitan los enfermos más graves de COVID-19.
Este viernes, hacia las 3:00 (21:30 GMT del jueves) se declaró un incendio -que ya fue extinguido- en un hospital a las afueras de Bombay, informó a la AFP Morrison Khavari, un responsable de los bomberos, según el cual se abrió una investigación. “Había diecisiete pacientes en la unidad de cuidados intensivos del hospital Vijai Vallabh, de los que 13 murieron y otros cuatro fueron trasladados a otras dependencias”, precisó.
Hace dos días, 22 pacientes de COVID-19 murieron en otro hospital del mismo Estado de Maharashtra debido a un corte del suministro del oxígeno de los respiradores durante media hora. Cuatro enfermos murieron también a principios de abril en el incendio de una clínica privada del Maharashtra y otro en un hospital de Bombay, en marzo, causó once muertos.
El COVID-19 se llevó el jueves por la noche a Sharvan Rathod, compositor estrella de Bollywood de los años 1990. Falleció en un hospital de Bombay a los 66 años, anunció su hijo a la agencia de prensa india PTI.
Reuniones de crisis
India ha registrado casi cuatro millones de casos de COVID-19 en abril, lo que acabó con la esperanza de principios de año de que había dejado atrás lo peor de la pandemia. Este repunte exponencial de casos fue atribuido, en parte, a la “doble mutación” del virus y a acontecimientos masivos como el festival religioso Kumbh Mela de Hardiwar, en el estado de Uttarakhand (norte), que atrajo a unos 25 millones de peregrinos hindúes, la mayoría sin mascarilla y sin guardar las distancias de seguridad.
El primer ministro indio, Narendra Modi, debe participar este viernes en al menos tres reuniones de crisis dedicadas, sobre todo, al abastecimiento de oxígeno y a la disponibilidad de medicamentos de primera necesidad.
“SOS”
La capital, Nueva Delhi, continúa siendo una de las zonas más golpeadas por la pandemia. Los hospitales de la ciudad lanzan llamados de socorro diarios al gobierno local y al nacional para reclamar que les suministren oxígeno.
“SOS – Menos de una hora de abastecimiento de oxígeno en el Max Smart Hospital y en el Max Hospital Saket. Esperamos nuevas provisiones (…) Más de 700 pacientes ingresados necesitan asistencia inmediata”, tuiteó el viernes Max Healthcare, una de las mayores cadenas de hospitales privados.
“Suspendemos los ingresos de pacientes en todos nuestros hospitales de la región de Delhi hasta que el abastecimiento de oxígeno se estabilice”, agregó poco después. Otros hospitales privados de la región llevan días publicando videos con llamados parecidos en las redes sociales. El jueves por la noche, al menos seis hospitales de la capital se quedaron sin oxígeno. A otros, solo les quedaban reservas suficientes para unas horas.
Tren “Oxygen Express” y aviones militares
“Los veinticinco pacientes más enfermos murieron en las últimas 24 horas. Solo queda oxígeno para dos horas […] Una crisis importante es probable. La vida de los otros 60 pacientes más afectados corre peligro, se necesita una intervención urgente”, advirtió el director médico del hospital Sir Gangaram, de Nueva Delhi, en un comunicado.
Hay camiones cisterna con oxígeno medicinal encargándose del suministro de clínicas de siete Estados las 24 horas, los siete días de la semana. Además, el ejército desplegó aviones de carga para llevarlos a aquellas regiones que no tenían. El primer tren “Oxygen Express” partió el jueves del centro industrial de Vizag, en el sur del país, rumbo a Maharashtra, cargado de camiones con oxígeno.
India ha reportado más de 16 millones de casos de COVID-19 y 187.000 decesos, aunque en proporción a su población (1.300 millones de personas), el balance continúa siendo inferior al de otros muchos países. LN
Fuente: AFP.