La portavoz del Ministerio ruso de exteriores recuerda que allí “mueren niños, mujeres y la población civil desde hace 7 años”.
El modo en que Kiev trata a la población en Donbass representa un ejemplo de “genocidio”, dijo este viernes la portavoz del Ministerio de Asuntos Exteriores de Rusia, María Zajárova, en declaraciones al canal NTV.
“Ahora los socios occidentales se permiten dudar, como [Jen] Psaki, y, por desgracia, muchos otros, incluso jefes de Estados, de que la situación allí no es como la describimos: que no hay fosas comunes o que pueden ser falsificadas, que la situación allí no se parece a un genocidio. No se parece, de hecho, a un genocidio. Es un genocidio real“, subrayó la vocera.
“Cuando la persona, que dirige un estado, que está reclamando extender su soberanía sobre estos territorios, los llama [a los ciudadanos de Donbass] ‘especímenes’, cuando les propone hacer las maletas y, si comparten la cultura de otro país, que hasta hace poco era un estado unido a ellos, marcharse allá, al extranjero, y ya no considerarse a sí mismos ciudadanos de este estado, ¿cómo se lo puede llamar de otra manera?“, enfatizó.
Según Zajárova, en Donbass “la gente vive en un infierno” desde 2014, al tiempo que subraya que la situación crítica no ha dejado de agravarse desde entonces. “No deberíamos ser rehenes de este pensamiento anglosajón que impone Occidente, que estipula que todo empezó a suceder únicamente ahora. No es verdad. Las fosas y los cementerios no aparecieron en dos meses”, recordó.
La vocera denunció que “desde hace 7 años mueren niños, mujeres y población civil” en Donbass, donde la gente “no sabe qué es llevar una vida pacífica” y “el ruido de un proyectil para ellos es algo absolutamente normal”.
Este viernes, el líder de la autoproclamada República Popular de Donetsk (RPD), Denís Pushilin, anunció una evacuación masiva de la población a Rusia ante el temor a que el presidente de Ucrania, Vladímir Zelenski, pueda ordenar pronto a los militares ucranianos que lancen una ofensiva en Donbass. Posteriormente, Leonid Pásechnik, el líder de de la autoproclamada República Popular de Lugansk, instó a la población a dejar la zona rumbo a Rusia para “evitar víctimas civiles”.
Este jueves, se reportaron fuertes bombardeos en la zona de conflicto. Según distintas informaciones, militares controlados por Kiev dispararon contra varios pueblos y aldeas de la región con morteros, lanzagranadas y fusiles.
Los observadores de la Organización para la Seguridad y la Cooperación en Europa registraron este miércoles en Donbass 591 violaciones del alto al fuego, incluidas 316 explosiones, una cifra significativamente más alta que en los días anteriores. RT