Las perspectivas para el crecimiento económico de Paraguay están siendo revisadas a la baja por todos los organismos internacionales y entidades locales, incluso algunos ya lo colocan en escenario negativo. El Banco Central del Paraguay (BCP) recientemente recortó la estimación del Producto Interno Bruto (PIB) oficial, por lo que crece la incertidumbre en el escenario económico, según afirmó el economista Jorge Garicoche.
“Las correcciones del BCP prácticamente indican que va a ser difícil crecer este año, algo que ya veníamos observando, además de que la expectativa de inflación es más alta, en torno al 8%, que dice incluso puede que llegue al 10%, entendiendo el margen. Un número alto que no estamos acostumbrados, pero que ya estábamos sintiendo en los últimos meses. Hay un montón de ruidos internacionales que vienen a afectar a la inflación”, dijo.
Por otro lado, el economista agregó que hay algunos puntos esperanzadores todavía, como la lluvia en los últimos tiempos, que permiten tener una mejor visión en el campo, mejorando la producción. “Hay dos componentes que son los que más están golpeando a la inflación en Paraguay. Por un lado, el consumo de los hidrocarburos, combustibles y, por otro lado, los alimentos”, afirmó.
En ese marco, Garicoche aclaró que no son los únicos factores, pero sí los más importantes dado el peso que tienen dentro de los gastos de las familias. “Por un lado hay una cierta esperanza en lo que refiere a la producción de frutihortícolas, verduras y frutas, de modo que aumente en oferta y tengan precios acorde”, indicó.
Sin embargo, aclaró que igual se presenta un factor de riesgo en este sector, relacionado con el conflicto bélico, ya que siempre que se habla del sector primario, se deben tener en cuenta los fertilizantes, donde Rusia es uno de los mayores productores mundiales. “La disminución de esa oferta termina afectando grandemente a todos los que requieren en el mundo esos productos, por lo que también el precio subió”, remarcó en conversaciones con canal Pro.
En cuanto a soluciones, dijo que hay otros organismos que, en colaboraciones público-privadas, tienen que estar trabajando fuertemente en apoyar a los pequeños productores para tratar de tener un poco más de resiliencia en la producción y aumentar los niveles de oferta.
Oportunidades
Por otro lado, añadió que cada situación de crisis trae consigo oportunidades que se pueden aprovechar, por lo que se deben ir observando. “No podemos dejar de mencionar que dentro de todas estas complicaciones, los precios de insumo para la producción del sector textil y confecciones aumentaron, por lo que inciden en los costos de las vestimentas a nivel global. De esto podríamos sacar algún tipo de provecho para poder fortalecer otra vez nuestra industria local”, afirmó. LA NACION