El distrito concentra la mayor producción de soja, maíz y trigo del país; productos que hoy son considerados los principales generadores de divisas de nuestro país.
PUBLICIDAD:
Asentada a 340 kilómetros de Asunción y 70 de la triple frontera (Paraguay, Brasil y Argentina) se encuentra Santa Rita, un distrito que en tan solo 26 años de haberse consolidado como tal, hoy es considerado uno de los más progresistas y desarrollados del departamento de Alto Paraná.
Fue fundado por inmigrantes brasileños en 1973 y la fertilidad de sus tierras convirtió al sector agrícola en su principal motor económico y dinamizador.
ñEn la zona se concentra la mayor producción de soja, maíz y trigo, a través de extensos cultivos ubicados en Santa Rita, Santa Rosa, San Cristóbal, Naranjal e Iruña.
En conversación con La Nación, César Torres, intendente de la localidad, reveló que de las 69.800 hectáreas de superficie, cerca de 45.000 son destinadas al cultivo.
Asimismo, afirmó que el 90% de la economía del municipio gira en torno a la agricultura, mencionando a la soja, el maíz y el trigo como los principales productos del sector.
NUEVOS RUBROS
El buen momento de la agricultura permitió que varias empresas desembarquen en Santa Rita, con intención de cubrir las necesidades generadas por el sector agrícola, entre ellas firmas del rubro metalmecánica, que apuesta a brindar servicios al sector industrial.
De la misma manera se asentaron en la ciudad entidades financieras, ferreterías, hoteles, restaurantes, casas de electrodomésticos, playas de vehículos livianos y pesados, supermercados, farmacias, entre otros, generando nuevos puestos de trabajo para la población, que actualmente asciende a 38.000 habitantes, según Torres.
El jefe comunal confesó que a pesar de la diversificación económica, la agricultura sigue siendo la base de la pirámide, alegando que toda la ciudad depende de los resultados de la cosecha, que si no sale como se espera, afecta a los demás rubros, en especial el comercial, que se resiente durante todo el año.
PUBLICIDADE.
UNIVERSIDADES
Las altas casas de estudio también arribaron a Santa Rita, donde se generó una fuerte demanda de formación y especialización. De acuerdo al intendente, las compañías necesitaban mano de obra especializada y al no encontrarla tuvieron que buscar en otras ciudades.
“Desde ese entonces se apostó por capacitar a la gente local. Actualmente, el distrito cuenta con una universidad nacional y varias privadas, que no solamente benefician a los habitantes de Santa Rita, sino también a personas de otras ciudades”, Torres.
PUBLICIDADE.
ALTERNATIVAS
La incorporación de maquinarias en el campo tuvo un efecto doble en Paraguay, en especial en aquellos distritos dependientes de la agricultura. Por un lado, la mecanización de los cultivos agilizó y facilitó el trabajo en el sector, pero al mismo tiempo redujo la cantidad de trabajadores que anteriormente se necesitaba para la siembra.
Por ese motivo, Santa Rita hoy apuesta a alternativas que puedan crear nuevas opciones de trabajo para su población actual, en su mayoría compuesta por jóvenes, y las próximas generaciones.
En este escenario, el distrito invertirá en una nueva subestación, que estará terminada para finales del 2017, mediante un convenio entre la Municipalidad de Santa Rita y la Administración Nacional de Electricidad (Ande).
La nueva subestación ofrecerá energía de calidad a aquellas empresas e industrias que deseen instalarse en la ciudad. El proyecto costará 20 millones de dólares.
REACCIONES
“Nuestra economía gira en torno a la agricultura”
Lo que ayudó a Santa Rita a crecer de manera rápida fue la tierra fértil y la integración entre brasileños y paraguayos. Geográficamente nuestro municipio se encuentra en un lugar estratégico, entre los distritos de San Cristóbal, Naranjal, Iruña, Santa Rosa y Tavaí.
Esto también le ayudó a desarrollarse. Actualmente, contamos con una población de 38.000 habitantes. Nuestra economía gira en torno a la agricultura, que en los últimos años avanzó bastante en todo lo que se refiere a tecnología.
Anteriormente, uno necesitaba 20 personas para trabajar en el campo, sin embargo, hoy con tres personas que manejen las maquinarias ya se cubre todo el trabajo. Por eso estamos buscando nuevas alternativas para nuestros jóvenes, apostando a conquistar más inversionistas que generen nuevas opciones de trabajo en la localidad.
“Motivados por la oportunidad de crecimiento en Paraguay”
Vine a Paraguay en 1974, con 4 años de edad. Desde que nos instalamos trabajamos en la agricultura. En ese tiempo todo el trabajo se hacía a mano, pero poco a poco fueron incorporándose las maquinarias que mecanizaron los cultivos de la zona.
Empezamos cultivando soja, maíz y poroto, los tres productos que más se plantaban en ese tiempo, pero con la mecanización apareció el trigo.
El motivo por el cual mis padres vinieron a Paraguay fue la fertilidad de la tierra y la oportunidad de crecimiento que ofrecía este país. Empezamos trabajando en familia y lo seguimos haciendo hasta hoy. Somos seis hermanos y hoy cada uno contamos con nuestra propia tierra y propio cultivo. Al año mantenemos entre todos una producción promedio de 525 toneladas de soja, 1.050 toneladas de maíz y cerca de 450 toneladas de trigo. La cantidad de producción depende del clima.
LA NACION
PUBLICIDADE:
